¿Por qué Trump no ha denunciado ataques racistas tras su elección?

Desde el 8 de noviembre, se han documentado más de 400 ataques raciales en EEUU

WASHINGTON.– Grupos cívicos, religiosos y sindicalistas instaron este viernes al presidente electo, Donald Trump, a que condene enérgicamente los ataques contra las minorías, como señal de su compromiso con la unidad nacional.

Durante una conferencia de prensa en Washington,  convocada por la Federación de Maestros Estadounidenses (AFT, en inglés), representantes de diversos grupos cívicos indicaron que más de un centenar de organizaciones han firmado una carta dirigida a Trump para que condene los actos motivados por el odio racial y la ideología detrás de éstos.

“Le pedimos que utilice su posición, su considerable plataforma, e incluso sus mensajes en Twitter para enviar un mensaje claro de que el odio no tiene cabida en nuestro discurso público, en nuestra política pública, o en nuestra sociedad”, indicó la misiva.

La presidenta de la AFT, Randi Weingarten, explicó que  no se trata de un asunto político sino de una “responsabilidad moral”, porque la inclusión social, la aceptación y el derecho a vivir libre de intimidación o ataques, son valores que deben guiar la reconciliación nacional.

Es que la mayoría de los grupos cívicos coincide en que, si bien Trump no creó el racismo –el país sufre un legado de racismo debido a su oscuro pasado de esclavitud de los afroamericanos-, su retórica incendiaria le dio alas.

Aunque también partidarios de Trump argumentan que han sido atacados, la mayoría de los acosos ha ido contra las minorías, a juzgar por los grupos cívicos.

En EEUU en 2016, el país “no debe permitir la normalización del  odio”, y Trump debe “demostrar liderazgo” para poner fin al ambiente nocivo que surgió durante y después de la contienda presidencial, indicaron los activistas.

En su primera entrevista el domingo pasado, tras su victoria en las urnas,  Trump criticó, aunque de forma tibia, en el programa “60 Minutes” de la cadena CBS los actos de acoso e intimidación.

Aunque Trump dijo que no estaba al tanto de un incremento en los incidentes raciales, pidió a los responsables “un freno” en esas actividades.

En la carta, los activistas consideraron que eso no era suficiente, máxime si, ese mismo día, nombró al ultraderechista Steve Bannon como su principal estratega y asesor político en la Casa Blanca.

El nombramiento de Bannon, después de todo, ha sido aplaudido por grupos supremacistas blancos como el Ku Klux Klan, y “The American Renaissance”.

Desde que Trump ganó la elección hace diez días, grupos como el “Southern Law Poverty Center” (SPLC, en inglés), han documentado un incremento en incidentes de acoso y ataques contra las minorías, asi como actos de vandalismo contra propiedas y escuelas, negocios e iglesias frecuentadas por las minorías.

Según SPLC, entre el 8 y 14 de noviembre pasados, ha habido 437 incidentes de intimidación contra afroamericanos, homosexuales, inmigrantes, musulmanes  y mujeres.

El grupo judío “Anti-Difamation League” (ADL) también está recabando denuncias de incidentes raciales.

Imágenes de televisión muestran cómo en un partido de baloncesto en una secundaria en Texas, por ejemplo, estudiantes blancos gritaban la consigna “Construyan el muro!” contra estudiantes hispanos.

En otro sitio público, también en Texas, se leía en un muro: “no más ilegales, 1-20-17”, con la fecha de la toma de posesión de Trump en enero próximo.

En el área de la capital estadounidense, una escuela y una iglesia frecuentada  por inmigrantes latinos sufrieron actos de vandalismo, con mensajes de odio racial pintados por grupos supremacistas blancos.

Iglesia Episcopal en Silver Spring (Maryland), con alta concentración de inmigrantes, halló un mensaje supremacista en sus instalaciones.
Iglesia Episcopal en Silver Spring (Maryland), con alta concentración de inmigrantes, halló un mensaje supremacista en sus instalaciones.

La AFT piensa establecer una  línea telefónica gratuita para que el público pueda denunciar incidentes contra las minorías, los inmigrantes, las mujeres y las comunidades de fe.

Mientras tanto, el sindicato de docentes ofrece a los maestros una página web con recursos y otros materiales para generar discusiones sobre los acosos y demás  secuelas de las elecciones.

El lunes pasado, alrededor de 400 estudiantes de varias escuelas en Silver Spring (Maryland) abandonaron sus aulas para protestar contra la elección de Trump, y esta semana ha habido vigilias y protestas en el Condado de Montgomery contra el acoso de inmigrantes y el posible “registro” y vigilancia de inmigrantes musulmanes.

Maureen Costello, directora de un programa de tolerancia de SPLC, dijo que estas elecciones han tenido un impacto “profundo y duradero” en las escuelas en todo el país, y es hora que los maestros pongan de su parte para “reparar el daño y asegurar que todos los niños se sientan bienvenidos en sus escuelas y comunidades”.

A ese llamado se sumó Lily Eskelsen García, presidenta del sindicato “Asociación Nacional de Educación” (NEA), quien señaló que los maestros son, a su juicio, la primera línea de defensa de los niños en las aulas, para que aprendan en ambientes seguros.

SPLC y otros grupos cívicos han dejado en claro que, así como los grupos supremacistas blancos están “celebrando” el ascenso de Trump al poder, corresponde ahora a las autoridades y a la sociedad civil tomar medidas para proteger a grupos vulnerables y mantener la presión para que Trump denuncie el racismo.

En esta nota

crimenes-de-odio Donald Trump Política Racismo

Recibe gratis todas las noticias en tu correo

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y Google Política de privacidad y Se aplican las Condiciones de servicio.

¡Muchas gracias! Ya estás suscrito a nuestro newsletter

Más sobre este tema
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain