En “Día de Acción Nacional”, los puertorriqueños rechazan recortes en la isla

Líderes boricuas realizan hoy un "día de acción nacional" para protestar contra los recortes impuestos por la junta fiscal

WASHINGTON.- En el marco de un “Día de Acción Nacional”, líderes puertorriqueños rechazaron este miércoles un plan de recortes masivos de la junta fiscal porque, a su juicio, impone condiciones de esclavitud y profundiza la “crisis humanitaria” en la isla, mientras el gobernador Ricardo Rosselló defendió en Washington su plan de reforma de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).

Las protestas organizadas por “VAMOS4PR” en Boston, Nueva York, Hartford, Chicago, Orlando, Seattle y San Juan, coincidieron con el 144 aniversario de la abolición de la esclavitud en Puerto Rico, y con una audiencia legislativa en la capital estadounidense sobre la crisis en la isla.

Aprovechando la fecha, los activistas exigieron un cese a las medidas de austeridad y “romper las cadenas” de una deuda que ahoga a la economía isleña.

En Chicago (Illinois), los activistas exigieron que las autoridades antepongan los intereses del pueblo puertorriqueño a los de los “fondos buitre” que buscan sacar ventaja de la deuda de $72,000 millones de Puerto Rico, en detrimento de las familias trabajadoras.

En concreto, la coalición de grupos sindicalistas, comunitarios y defensores de los derechos humanos advirtieron de que el plan de la junta fiscal que supervisa la gestión de la crisis causará recortes masivos en los salarios y servicios públicos, incluyendo los de salud y educación, con graves consecuencias para la población.

En declaraciones a este diario, el ingeniero de “Humboldt Park Latino Housing” y líder sindicalista puertorriqueño, Noel Sánchez, dijo que escogieron esta fecha porque, pese a celebrar otro aniversario de la abolición de la esclavitud, la isla de Puerto Rico “sigue sumida en una grave crisis”.

“Los grande bancos están tratando de utilizar la crisis económica para privar a mi familia del derecho a asuntos básicos como el agua limpia y la educación. Mi familia no causó esta crisis, pero está pagando por ello”, dijo Sánchez, miembro del Sindicato Internacional de Trabajadores de Servicio (SEIU).

“Han pasado 144 años pero los grandes bancos aún no ven a mi familia como seres humanos, solo ven cómo hacer más dinero, y están dispuestos a negarle un futuro a 3,5 millones de puertorriqueños… seguiremos luchando para que haya justicia en la isla”, afirmó Sánchez, quien emigró a EEUU hace 22 años, dejando atrás a su familia.

Los activistas señalaron, por ejemplo, que la junta fiscal paga a la empresa McKinsey and Co más de un millón de dólares al mes por concepto de “consultas” mientras las familias puertorriqueñas afrontan adversidades.

Por su parte, el legislador demócrata de Illinois, Luis Gutiérrez, de origen boricua, envió hoy una carta de apoyo a los manifestantes en la que aplaudió sus esfuerzos por “dar voz a las preocupaciones” de los puertorriqueños en la isla y oponerse a más medidas de austeridad.

Puerto Rico fue uno de los últimos sitios que abolió la esclavitud en las Américas pero ahora los puertorriqueños  “están encadenados a la miseria, por una creciente crisis humanitaria sin precedente en la historia de la isla”, lamentó Gutiérrez.

El legislador criticó la débil respuesta del gobierno de San Juan, del Congreso y de la junta fiscal, así como la aparente hostilidad de Washington a una reestructuración justa de la deuda.

Polémica vista

En la vista del subcomité de Recursos Naturales de la Cámara de Representantes, el gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, argumentó que la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) podría afrontar un proceso de reestructuración semejante a una bancarrota si la entidad no logra un acuerdo con los acreedores.

La audiencia dejó al descubierto las crecientes tensiones entre el gobierno de Rosselló y los acreedores, luego de un acuerdo pactado en diciembre de 2015 para reestructurar la deuda de $9,000 millones de la AEE.

Tras asumir el poder en enero pasado, Rosselló dejó en claro que prefería renegociar el polémico acuerdo original, que prevé una reducción del 15% en el pago de la deuda a cambio de la emisión de bonos respaldados por cargos adicionales en las facturas de los consumidores.

El lunes pasado, de hecho, Rosselló divulgó a los acreedores una versión modificada del acuerdo, y en la audiencia de hoy explicó que la versión original perjudicaría a los puertorriqueños, en unos momentos en que la crisis tiene al borde de la insolvencia al sistema de salud y las pensiones.

En esta nota

Congreso Estados Unidos junta fiscal Puerto Rico Ricardo Rosselló

Recibe gratis todas las noticias en tu correo

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y Google Política de privacidad y Se aplican las Condiciones de servicio.

¡Muchas gracias! Ya estás suscrito a nuestro newsletter

Más sobre este tema
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain