Policía alerta a la comunidad sobre llamadas fraudulentas contra inmigrantes
Los estafadores utilizaron la linea de atención 911 para indagar sobre el status migratorio de cientos de personas
El caso ocurrió en Dallas donde estafadores han estado llamando a miembros de la comunidad inmigrante haciéndose pasar por operadores de la linea de emergencia 911 preguntando por su estatus migratorio.
Lo que más llamó la atención de las autoridades fue que en los identificadores de llamadas se registraba la linea 911 como quien hacía la llamada, sin embargo no lo era, explicó Gerardo Monreal, detective de la unidad delitos financieros a Mundo Hispánico.
Este nuevo caso de hostigamiento contra la comunidad inmigrante llega a escasos tres meses de que la ley SB4 entre en vigencia en todo el estado de Texas. Esta ley prohíbe las ciudades “santuario” en todo el estado así como criminaliza cualquier acción de oficiales públicos o policiales que no colaboren con las autoridades migratorias.
“Los operadores del 911 no hacen llamadas a la comunidad para obtener información, si un oficial llama se identifica”, dijo Monreal queriendo dar un poco de tranquilidad a la comunidad que abarrotó las lineas de atención del departamento de policía de Dallas tras las alarmantes llamadas.
Lamentablemente, aseguran las autoridades, este tipo de acciones de estafa y hostigamiento contra la comunidad inmigrante van a seguir latentes gracias al difícil clima político que vive esta comunidad como consecuencia de las leyes migratorias de la administración actual.
“Si alguien recibe una llamada de las autoridades y están inseguros de la identidad de la persona que llama, deben comunicase directamente con el Departamento de Policía” concluyo el jefe de policía.
“Las autoridades nunca van a llamar y demandar dinero o que se pague un orden de arresto por teléfono, o mucho menos a pedir datos personales como el número de Seguro Social o el status migratorio de las personas”.
Mientras los casos de hostigamiento siguen en ascenso, sobre todo a través de las redes sociales, lo importante es que la comunidad inmigrante deje el miedo atrás y no se desanime a la hora de reportar crímenes.