Líder religioso abandona su iglesia porque esta apoya políticas “racistas” de Donald Trump
El pastor bautista esperaba que su congregación condenara las políticas nacionalistas de la derecha-alternativa
Un pastor ha abandonado la Convención Bautista del Sur, de la que ha hecho parte toda su vida, por la inmoralidad de sus actos, asegura el religioso en una carta dirigida al New York Times.
Lawrence Ware, un pastor de la iglesia bautista anunció su retiro de la congregación detallando entre sus razones la inmoralidad de su iglesia por ser cómplice en el surgimiento de la derecha-alternativa, un movimiento nacionalista y extremadamente racista el cual apoya las políticas del presidente Trump.
“Mi razonamiento es simple: como académico de raza negra y como religioso que está comprometido con la justicia social, no puedo ser parte de una organización que es cómplice en el inquietante aumento de la llamada derecha-alternativa, cuyos miembros apoyan las políticas aberrantes de Donald Trump y cuya inquietante historia racial y acciones recientes revelan un profundo compromiso con la supremacía blanca”, asegura la carta del religioso.
Su decisión llegó luego de la reunión anual de la Convención Bautista del Sur que se llevó a cabo el mes pasado. Durante el encuentro, Dwight McKissic otro ministro de raza negra del estado de Texas, presentó una resolución que denunciaba la supremacía blanca, las ideologías retrógradas, los prejuicios xenófobos y las intolerancias raciales de la llamada derecha-alternativa. Su llamado buscaba que la congregación condenará dicha ideología alejándose públicamente de ella.
Sin embargo la resolución que debía haberse adoptado inmediatamente, según el religioso, fue negada negada en primera instancia lo que obligó a su decisión de abandonar para siempre la congregación.
Lo que más le molestó a Ware, según su carta publicada por el NYT, es que mientras se negaron a adoptar la resolución que condena la supremacía blanca, no dudaron en retirar del lugar a activistas que trataron de crear conciencia sobre las formas en las que la congregación discrimina a miembros de la comunidad LGBTQi.
“Para mí, el daño ya estaba hecho. Se hizo evidente para mí que era hora de irse. No sé por qué me quedé tanto tiempo”.
Ware considera finalmente que este ascenso de la derecha alternativa junto a las políticas de Trump han convertido a la Convención Bautista del Sur en una organización más política que espiritual.