Ombudsman de México: “Digamos no a los discursos de odio” en EEUU
En México hay un “Estado de Derecho débil”, que tolera la impunidad y eso, a su vez, agrava la inseguridad porque alimenta la violencia y la corrupción, afirmó González.
WASHINGTON –La Administración Trump debe abandonar su “discurso de odio” contra los inmigrantes y no violentar sus derechos, afirmó este jueves el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) de México, Luis Raúl González Pérez, quien además calificó de “insuficiente” la gestión del gobierno de su país en el tema de seguridad y derechos humanos.
En entrevista con este diario para hacer un balance de su visita de trabajo a Washington, el ombudsman de México hizo un repaso tanto de las condiciones que atraviesan los inmigrantes mexicanos y latinos en general en la “era de Trump”, como el “débil” Estado de Derecho y el problema de impunidad en su país.
Su visita tuvo el propósito de mostrar el “rostro humanitario” del problema de inmigración y “elevar la voz por el respeto de la dignidad de las personas, por el respeto del cumplimiento de la ley, por el respeto del debido proceso, porque el cumplir la ley no quiere decir que se violenten los derechos humanos”, explicó González Pérez.
“Digamos no a los discursos de odio… venimos a alzar la voz para que evitemos discursos de odio, discursos de xenofobia y de racismo, que provocan divisiones y polarizaciones”, enfatizó el ombudsman.
El funcionario precisó que aunque hasta ahora no ha habido bajo la nueva Administración una “deportación masiva”, como la que prometió el presidente Donald Trump durante la contienda de 2016, a México además le preocupan las condiciones que viven los inmigrantes en los centros de detención en EEUU y la incertidumbre que atraviesan los “Dreamers” tras la eliminación del “DACA”.
Los inmigrantes indocumentados huyen de situaciones de violencia y pobreza, y “el estar en una situación indocumentada no les cancela su dignidad, la dignidad es intrínseca a toda persona, eso no permite que sean maltratados” o se les prive del derecho al debido proceso, declaró.
La CNDH ha recabado testimonios de migrantes mexicanos que han sufrido abusos en esos centros de detención, especialmente en las llamadas “hieleras”, y ha solicitado medidas cautelares ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Si bien la presidencia de Barack Obama produjo una cifra récord de deportados a México, la diferencia ahora, aseguró González Pérez, es “el discurso de odio, el discurso xenofóbico, de miedo, de amenaza, que genera polarización en los barrios, en las escuelas, en los hogares”.
Eso ha dado pie a leyes estatales que, con pretextos, se ensañan contra los inmigrantes indocumentados, como ha sido el caso de la ley estatal “SB4” en Texas, dijo González Pérez, cuya entidad ha apoyado las demandas contra esa medida.
Respecto a la revisión del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN, o NAFTA en inglés), otra área de roces entre EEUU y México, el funcionario insistió en que “ningún acuerdo comercial puede estar por encima de la dignidad de las personas”.
Además de denunciar los abusos contra los inmigrantes en EEUU, la comisión también ha puesto en marcha una campaña bilingüe para incentivar la naturalización de los 3,4 millones de mexicanos que reúnen los requisitos y aún no la han tramitado.
Peña Nieto, “insuficiente, no reprobado”
González Pérez también repartió palos al gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, al señalar que en México hay un “Estado de Derecho débil”, que tolera la impunidad y eso, a su vez, agrava la inseguridad porque alimenta la violencia y la corrupción.
México ha tenido un año mortífero: entre enero y octubre pasados, las autoridades han dado cuenta de 20,875 homicidios, casi 4,000 más que el mismo período en 2016, y solo el 10% de los casos de asesinatos y desapariciones de periodistas ha obtenido sentencias condenatorias.
“Tenemos una crisis de seguridad porque la política de seguridad no ha funcionado porque no se ha querido ver una respuesta integral. Soluciones parciales dan resultados parciales… llevamos 11 años diciendo que profesionalizamos policías y no está ocurriendo”, advirtió.
Preguntado sobre qué calificación merece Peña Nieto en el tema de seguridad, sin titubear afirmó que es “insuficiente”.
“Yo diría que insuficiente… no reprobado, insuficiente, porque para reprobarlo diría no hay normas no hay marco jurídico, no hay estructuras. Tenemos estructuras y hay que fortalecerlas, tenemos leyes y muy buenas, pero falta materialización”, matizó.
Sin embargo, consideró que, en medio de un panorama tan sombrío, México sí tiene aspectos positivos, como el hecho de que su país está abierto al escrutinio internacional, ha hecho “grandes avances” en el reconocimiento de derechos –el problema es una “brecha” entre las normas y su aplicación-, y “leyes de avanzada” contra la tortura y desapariciones.
En ese sentido, dijo que la CNDH vigilará que los gobiernos estatales cumplan con su compromiso de dotar esas leyes de recursos.
La CNDH tiene una amplia agenda que incluye la defensa de los derechos de las mujeres, los migrantes, y los comunicadores, y busca servir de “contrapeso” a las arbitrariedades o abusos de poder en México.
En concreto, la CNDH trabaja en torno a tres ejes: la defensa de los migrantes frente al endurecimiento de la política migratoria de la Administración Trump; facilitar la reinserción de los deportados, y el exigir “congruencia” al gobierno de Peña Nieto en el trato a migrantes centroamericanos en territorio mexicano.
“Congruencia es lo que estamos pidiendo hacia el Norte pero, aplícalo, no lo declares, aplícalo en el sur de la frontera mexicana con los nacionales centroamericanos”, precisó.
González Pérez se mostró satisfecho de que en los últimos tres años su entidad ha contado con los recursos para sus labores.
En el marco de su visita de trabajo de dos días, que concluye hoy, el presidente de la CNDH ha mantenido reuniones con asesores del Senado, miembros de la Administración Trump, y representantes de grupos de la sociedad civil.