La advertencia de Trump a México y Canadá sobre aluminio y acero
El presidente coloca un nuevo candado en medio de las negociaciones del TLCAN
El presidente Donald Trump ha vinculado sus planes arancelarios sobre las importaciones de aluminio y acero a sus esfuerzos por renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), por lo que advirtió que Canadá y México solo evitarían los aranceles si llegan a nuevo acuerdo con Washington.
A través de su cuenta personal de Twitter, el mandatario republicano aseguró que hay déficits comerciales con ambas economías, por lo que es indispensable un TLCAN “más justo” para Estados Unidos.
“Tenemos grandes déficits en el acuerdo con México y Canadá. El TLCAN, que está actualmente en negociación, ha sido un mal acuerdo para EEUU. Una masiva relocación de empresas y trabajos. Las tarifas en acero y aluminio desaparecerán si no hay un nuevo y justo TLCAN”, dijo en una primera parte.
We have large trade deficits with Mexico and Canada. NAFTA, which is under renegotiation right now, has been a bad deal for U.S.A. Massive relocation of companies & jobs. Tariffs on Steel and Aluminum will only come off if new & fair NAFTA agreement is signed. Also, Canada must..
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) March 5, 2018
En una segunda parte de su mensaje, el presidente Trump añadió que es necesario que Canadá trate mejor a los agricultores estadounidenses, además acusó a México de no establecer fuertes medidas en el tráfico de drogas: “México tiene que hacer mucho más para frenar la entrada de drogas en Estados Unidos. No hacen lo que tienen que hacer. Millones de personas son adictas y están muriendo”.
…treat our farmers much better. Highly restrictive. Mexico must do much more on stopping drugs from pouring into the U.S. They have not done what needs to be done. Millions of people addicted and dying.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) March 5, 2018
El presidente finalizó su cadena de mensajes, defendiendo que para proteger el país, se debe proteger el acero estadounidense. Y añadió su famoso lema “America first”.
El ministro de asuntos exteriores de México, Luis Videgaray, no tardó en responder al mandatario republicano, alegando que abordar el problema del tráfico de drogas debe ser un esfuerzo común: “Solo trabajando juntos y abordando la oferta y la demanda podremos detener el flujo ilegal de drogas, efectivo y armas, en ambos sentidos”.
Estas declaraciones de Trump parecen apuntar en la misma dirección que los ataques que el presidente lanzó contra la Unión Europea, amenazando con imponer nuevos impuestos a los fabricantes de automóviles de este continente si Bruselas tomaba represalias contra sus tarifas de acero y aluminio.
El anuncio que ha realizado esta mañana el presidente, sumado a las recientes declaraciones en contra de Europa, parecen indicar una voluntad por dar un paso más en su lucha comercial con los aliados tradicionales de los Estados Unidos.
Aunque Estados Unidos se queja de la introducción en el mercado por parte de China de metales baratos, lo cierto es que el mayor impacto de esto lo sufre Canadá, como mayor fuente exterior de las importaciones estadounidenses de metal. Las industrias de acero y aluminio de Canadá y Estados Unidos están tan integrados que el mismo sindicato representa a los trabajadores en ambos países.
Además, en contra de las declaraciones del presidente Trump alegando que el tratado perjudica a Estados Unidos, se observa un superávit de 12.5 billones de dólares con Canadá en 2016 . Los datos son ofrecidos por el Representante del Comercio de los Estados Unidos, una oficina perteneciente al Gobierno.
Por su parte, México fue el cuatro proveedor más grande de los Estados Unidos en 2017, representando poco menos del 10% de las importaciones estadounidenses.
La amenaza de una guerra comercial de acero ha estado presente en las últimas negociaciones del NAFTA desde que Trump anuncio la pasada semana sus planes de imponer aranceles. Se espera que la orden formal se emita esta semana.
Desde el anuncio, Canadá y México han estado luchando para obtener exenciones aunque los negociantes de la Casa Blanca han asegurado que no entra en los planes del presidente permitir excepciones, como hizo George W. Bush en 2002 al excluir de los impuestos arancelarios del acero a Canadá y México.