Servicio Postal en alerta por envío de paquetes con bombas; suman 8 contra críticos de Trump
USPS alerta a ciudadanos que cualquier reporte debe ser dirigido al FBI para investigación
El paquete dirigido al exvicepresidente Joe Biden. Crédito: Captura CNN
A través de su oficina de Inspección, el Servicio Postal indicó que colabora con el FBI para rastrear posibles paquetes con explosivos similares a los enviados a 10 demócratas y críticos del presidente Donald Trump.
El Servicio Postal tiene amplia experiencia sobre cómo ubicar un paquete sospechoso, pero después de los ataques terrosista del 9/11, esa dependencia y agencias de Inteligencia reforzaron los procedimientos de revisión de correo.
El año pasado, los inspectores postales respondieron a 2,282 paquetes sospechosos en los Estados Unidos, reportó la agencia en su informe anual.
Esa cifra es mínima, considerando los 150,000 millones de piezas de correo procesado, pero ha habido casos importantes y algunos de los empleados postales han sido asesinados al tratar con los paquetes.
En el otoño de 2001, en la atmósfera tensa y aterrorizada que siguió a los ataques del 11 de septiembre, hubo envío de sobres con ántrax a las organizaciones de medios de comunicación en Florida y Nueva York, así como a las oficinas del entonces líder de la mayoría en el Senado Tom Daschle y al senador Patrick Leahy. Dos empleados postales murieron en una instalación de procesamiento de correo en Washington.
El número final de muertos fue de cinco personas; el presunto culpable, el científico del Ejército Bruce Ivins, quien estaba mentalmente enfermo y se suicidó en 2008.
En la actual crisis por paquetes enviados ya suman 10 los casos a:
- Hillary Clinton, exsecretaria de Estado
- Barack Obama, expresidente
- Joe Biden, exvicepresidente en la Administración Obama
- Maxine Waters, representante demócrata
- Robert De Niro, actor en Nueva York
- George Soros, multimillonario filántropo en Nueva York
- John Brennan, exdirector de la CIA y enviado a edificio de CNN en Nueva York
- Debbie Wasserman y Eric Holder, en Florida
