La “deportación’ de un predicador que pone a pensar a Donald Trump
Una "green card" muy controversial
WASHINGTON – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, señaló hoy que no están evaluando una posible deportación del predicador turco exiliado en territorio estadounidense Fethullah Gülen, como algunos medios de comunicación han sugerido esta semana.
“No está bajo consideración” la extradición de Gülen, dijo el mandatario a los periodistas antes de partir a California para examinar la situación por los incendios.
Aun así, “eso es algo que siempre miramos, pero en este punto, no”, indicó.
Trump subrayó que EEUU está pasando por “un momento muy bueno” con Turquía y destacó que se lleva “muy bien” con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan: “Es amigo mío, es un hombre fuerte, un hombre duro y un hombre inteligente”.
Medios de comunicación estadounidenses, como la cadena de televisión NBC, había apuntado que la Administración de Trump estaba considerando una posible extradición de Gülen, reclamado por Turquía, para tranquilizar a Ankara tras el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi en el consulado de su país en Estambul.
De acuerdo al canal, Gülen ha vivido en Pensilvania (EEUU) desde finales de los 90 del siglo pasado y dispone de “green card” (tarjeta de residente permanente).
El Gobierno turco atribuye a Gülen el fallido golpe de Estado de 2016.
Desde la intentona golpista, más de 8.500 miembros de las Fuerzas Armadas, entre ellos 150 generales, han sido expulsados por sus presuntos vínculos con Gülen, que fue hasta 2013 aliado del partido Justicia y Desarrollo (AKP), la formación que gobierna Turquía desde 2002.