Imputan al presidente del comité japonés por los Juegos Olímpicos de Tokio 2020
Tsunekazu Takeda es sospechoso de haber sobornado a miembros del COI, para que Japón lograra la sede olímpica
El presidente del Comité Olímpico Japonés, Tsunekazu Takeda, está imputado en Francia por “corrupción activa“, sospechoso de haber sobornado a miembros africanos del Comité Olímpico Internacional (COI) para que Tokio lograra la atribución de los Juegos de 2020, confirmaron a Efe fuentes judiciales.
Takeda, considerado uno de los artífices de que la capital japonesa se impusiera en 2013 a Madrid y Estambul, fue interrogado el mes pasado por un juez francés que desde hace tres años investiga presuntas irregularidades, agregaron las fuentes.
Los investigadores franceses rastrean el pago, poco antes del voto de Buenos Aires que dio a Tokio los Juegos de 2020, de 1.8 millones de euros a una empresa interpuesta, tras la cual se encontraba el senegalés Papa Massata Diack, hijo del entonces presidente de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF), Lamine Diack, según revela el vespertino “Le Monde”.
Ese dinero, oficialmente para la elaboración de dos informes, pudo servir para sobornar a miembros africanos del COI a través del influyente Diack, que hizo campaña entonces por la capital nipona.
Fue precisamente la investigación abierta contra el exdirigente senegalés y su hijo, ambos imputados en Francia por presunta corrupción, lo que puso de relieve esos pagos sospechosos, que han llevado a investigar a Takeda.
Interrogado por vez primera en Tokio en febrero de 2017, el presidente del comité japonés confirmó esos pagos, pero no pudo justificar la elaboración de los informes.
Un segundo interrogatorio, el pasado 10 de diciembre, abrió la puerta a su imputación.
Según los investigadores, el dinero circuló a través de una empresa basada en Singapur, denominada Black Tidings, antes de llegar a los bolsillos del hijo de Diack.
El primer pago, de casi 800.000 euros, data del 30 de julio de 2013 y el segundo, de 1 millón, del 28 de octubre de ese mismo año, apenas diez días antes del voto en Buenos Aires de la Asamblea General del COI.
Tokio ganó en la segunda vuelta a Estambul, que había desbancado a Madrid en la primera tras un voto de desempate. La capital nipona obtuvo 42 votos en la primera votación y 60 en la segunda, frente a los 36 de la ciudad turca.
Según “Le Monde”, en la capital argentina Diack hizo campaña por Tokio entre los votantes africanos, oficialmente por el apoyo que la candidatura había prometido a la IAAF.
Takeda, bisnieto del emperador Meiji, preside el comité japonés desde 2001 y todo apunta a que será reelegido en junio próximo para un undécimo mandato, pese a que supera la edad máxima reglamentaria de 70 años.
Tras haber participado en los Juegos Olímpicos de Múnich 1972 y Montreal 1976 en la disciplina de hípica, en 2012 fue nombrado miembro del COI en razón de su cargo al frente del comité japonés. Desde 2014 preside la Comisión de Mercadotecnia del organismo internacional.
Como presidente de la candidatura de Tokio, en su país es considerado el artífice de la victoria, aunque en la actualidad es vicepresidente del Comité Organizador de unos Juegos previstos entre el 24 de julio y el 9 de agosto del año próximo.