Hallan muerta en maletero de auto a latina desaparecida tras salir de discoteca en Boston
El FBI investiga el caso, que involucra tres estados: Rhode Island, Delaware y Massachusetts
Jassy Correia estaba desaparecida desde el domingo Crédito: CAPTURA NBC NEWS
Jassy Correia, joven que estaba desaparecida desde la madrugada del domingo tras salir de una discoteca en Boston, fue hallada muerta en Delaware, dentro del maletero del auto al que la vieron subir con Louis D. Coleman III, un hombre que no conocía y que ha sido detenido.
Correia (23), madre de una niña, salió a bailar la noche del sábado con su novio y unos amigos en el club nocturno “Venu”, en el distrito teatral de Boston, pero nunca regresó a casa.
El martes fue su cumpleaños, pero no se ha establecido si ya estaba muerta para entonces.
Coleman (32), residente de Rhode Island, también fue detenido el jueves en Delaware, estado que no es fronterizo con Boston (Massachusetts).
La policía de Boston dijo que se había recuperado un cuerpo y que estaban esperando una identificación positiva. Pero la familia confirmó el hallazgo por su lado. “Recibimos noticias devastadoras hoy y Jassy ya no está con nosotros”, dijo anoche a NBC News Katia Depina, prima de Correia.
Coleman estaba siendo buscado en relación con el secuestro de Correia. La policía de Providence (RI) dijo que Coleman fue detenido en Delaware y que se encontró un cuerpo en el maletero de su vehículo.
Correia fue vista en imágenes de vigilancia con un hombre desconocido alrededor de las 12:15 a.m. del domingo. Más tarde ambos se subieron a un vehículo rojo, el mismo donde fue encontrado el cuerpo ayer.
Se llevó a cabo una orden de registro en el apartamento de Coleman en Chestnut Street, pero el jefe de la policía de Providence, Hugh Clements, dijo que no podía dar detalles sobre lo que habían encontrado.
Clements agregó que el caso estaba siendo tratado como homicidio. Dijo que las policías de Providence y Boston están investigando en colaboración con la Oficina del Fiscal General de Rhode Island y del Fiscal General de Estados Unidos, así como las dependencias locales del FBI.
“Las mujeres deben tener el derecho de ir a cualquier club nocturno y usar lo que quieran y no preocuparse por ser secuestradas y asesinadas al final de la noche”, dijo una amiga de la familia.
