Benzemá anota un triplete y vuelve a dar la victoria a un sólido Real Madrid
El impactante paso del francés le reditúa al club blanco para no perder el paso en La Liga
MADRID, España – El mejor Karim Benzema, respondiendo con regularidad a la cita con el gol y acercándose a sus mejores números de blanco, premió con un triplete la mejoría de imagen del Real Madrid, que tomó en serio la visita de un Athletic Club (3-0) que ampliará a quince los años sin vencer en el Santiago Bernabéu.
Autor de los ocho últimos goles ligueros del Real Madrid, en una marca inédita hasta la fecha, Benzema demuestra cada partido que es el único futbolista de peso de la plantilla que ha cumplido un año para el olvido. En racha goleadora. Marcando cinco partidos seguidos por segunda vez desde que llegó. Auténtico referente del equipo. Enganchó dos testarazos castigando los despistes de Íñigo Martínez y cerró su triplete tras un error del meta Herrerín.
Y eso que la irregularidad madridista y su particular penitencia invitaba a pensar al Athletic en que era buen momento para desafiar su historia reciente en el Bernabéu y lanzar su candidatura a Europa. Catorce años sin vencer en Chamartín. Trece derrotas seguidas hasta el empate del pasado curso. Una sangría que buscó corregir Gaizka Garitano imponiendo orden en sus líneas, con presión a media altura, asfixiante cuando recibía Modric para no dejar jugar al rival. Le duró 47 minutos. Hasta que apreció Benzema.
Los intentos de Marco Asensio no cesaron todo el encuentro. Pidió siempre el balón, con personalidad, sin miedo a fallar, y conectó dos veces con Marcelo en su cara más ofensiva, pero sin acierto en el remate.
Sin agobios para el Athletic, le costó interpretar la parte ofensiva de su plan. No conectó nunca con Iñaki Williams, secado en un gran marcaje de Jesús Vallejo, la gran novedad del once de Zidane y que sorprendió con el nivel que mostró en una titularidad en Liga casi un año después.
Tras el primer tanto de Benzema, nunca se levantó del golpe el Athletic. Le faltó fútbol y sobre todo fe para hacerlo. El Real Madrid ganó confianza con su gol y comenzó a disfrutar al ritmo de Modric. Kroos y Marcelo perdonaban el segundo en minutos en los que desataba un buen fútbol. Asensio dejaba una ruleta deliciosa, Benzema acariciaba el palo con hambre de más y hasta una discusión, entre Lucas y Casemiro, era un muestra de que sin nada en juego también se puede poner seriedad en el campo.
El único momento de duda madridista, cuando el Athletic adelantó metros buscando un punto, coincidió con la salida al campo de Isco y un Bale sentenciado. El galés fue silbado por su afición con cada balón que tocó. Empujado por la presión ambiental hasta a fallar un mano a mano con todo para marcar. Ya estaba Benzema para evitar cualquier reacción. Otro error en el marcaje de Íñigo lo castigaba con un nuevo cabezazo a la red tras saque de esquina y la sentencia al duelo.
Los intentos del Athletic, con un zurdazo de Raúl García y un remate a bocajarro de Williams que sacó brillantemente Keylor acabaron en impotencia en un final con triplete de Benzema y el castigo a otro error. Una mala salida de Herrerín dejó el balón a Bale que regaló el tanto a Karim para poner el broche a un partido en el que dejó su nombre para la historia del Real Madrid.