Creó sandalias con tweets contradictorios de Trump y vendió 1,000 en pocos días

Algunos de los tweets más escandalosos del presidente Trump se han convertido en un buenísimo negocio para un hombre que decidió usarlos para vender exitosamente un montón de sandalias.

A Sam Morrison, que se dedicaba a hacer camisas de serigrafía, entre otras cosas, se le ocurrió imprimir algunos de los tweets más contradictorios del presidente estadounidense en la parte de enfrente de unas sandalias.

“Da un vistazo a los 40,000 tweets de Donald Trump, y de seguro verás algunas opiniones contradictorias. Quería destacar esta hipocresía”, dijo Morrison respecto a su idea de negocio.

Enorme éxito

Morrison tenía un trabajo de tiempo completo en la industria de la publicidad, pero tan pronto sus sandalias comenzaron a tener éxito, se dedicó sólo a fabricarlas. Él imprimió y empacó cada par.

Morrison comenzó a ofrecer las sandalias a través de su sitio web PresidentFlipFlops.com, en donde logró vender mil pares en menos de un mes a $30 dólares cada uno, a pesar de que no invirtió nada en publicidad.

Tristemente, este producto era de edición limitada, por así decirlo, por el esfuerzo y complejidad que hay para producirlo. “El pedido mínimo de materias primas fue de 1,000 pares y tardaron dos meses en llegarme. Imprimí a mano todos los 1,000 pares con una prensa de calor, empaqueté y envié todo por mí mismo, por lo que fue un proyecto que consumió mucho tiempo”.

En total, Morrison ofreció tres diseños diferentes de las sandalias basadas en tweets contradictorios de Trump.

Por ejemplo, están las ‘Edición Siria’. En 2013, Trump hizo una publicación pidiendo al presidente Barack Obama no atacar a Siria. En abril de 2017, Trump atacó a este país.

Después están las chancletas ‘Edición Colegio Electoral’. En noviembre de 2012, el presidente publicó que el Colegio Electoral “es un desastre para la democracia”. En 2016, después de ganar las elecciones, Trump publicó que en el Colegio Electoral en realidad son genios.

Después está el diseño ‘Edición Fuentes’. En 2012, Trump publicó que el certificado de Obama era un fraude, y que basaba en una “fuente extremadamente creíble”, aunque nunca dijo cuál. Cuatro años más tarde, Trump instó a las personas a no creer a nadie que cite fuentes anónimas.

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