7 claves para saber si tu pareja te engaña o no
No existen señales infalibles para determinar la infidelidad pero ciertas pistas abren la sospecha
La confianza es uno de los componentes más importantes en una relación. Si tienes seguridad en tu pareja, podrás notar que el tiempo juntos es más placentero y las peleas se resuelven con mayor facilidad. Pero, ¿qué pasa cuando surgen las dudas?
Lo primero es entender que resulta normal desconfiar en algún momento, sobre todo si se trata de una relación larga. En este sentido, es necesario priorizar la comunicación, y en lo posible, asegurarse de que existen buenos motivos para sospechar. A la hora de detectar si la duda es válida, hay algunas señales que te pueden indicar que algo pasa con tu pareja.
Principales señales de que tu pareja te engaña
Cabe destacar que no hay fórmula exacta para determinar si una persona es infiel o no, así que no es recomendable obsesionarse, pero existen comportamientos que pueden plantear la posibilidad. Aquí juega un papel protagónico tu observación e intuición. Las señales son:
- Pruebas evidentes: hay señales muy visibles de infidelidad. Tal es el caso de los olores a perfumes del sexo opuesto, recibos o gastos desconocidos en lugares sospechosos, cambios o marcas en la ropa, entre otros. Estos puntos se deben dar más de una vez para que se convierta en una señal.
- Cambios en el comportamiento: si comienza a adoptar repentinamente hábitos que antes no tenía y que no concuerdan con su personalidad o estilo de vida, puede ser una señal para dudar.
- Aumenta el uso del teléfono: en caso de que ahora se la pase hablando por teléfono o enviando mensajes, y prefiera no dar explicaciones, puede ser indicador de sospecha. Además, si aumenta la seguridad de su teléfono y evita dejarlo solo, te está dando claras señales para que desconfíes.
- Miente y cambia las historias: si al preguntarle por su día narra algunos detalles de forma dubitativa, prefiere evitar la pregunta o simplemente cambia la historia cada vez que le hablas y se contradice, debes estar atenta.
- Se victimiza o está a la defensiva: notas que la comunicación se ha vuelto difícil porque al expresar tus dudas, tu pareja reacciona de forma exagerada, impidiendo que se dé un buen diálogo.
- Se esfuerza por mejorar su apariencia física: Además del comportamiento, también busca cambiar su apariencia y le dedica mayor tiempo a las actividades físicas o cambia su alimentación.
- Busca más tiempo para estar solo: dejó de incluirte en sus planes de vida y de entretenimiento, ahora prefiere salir solo. También se da el caso de personas que comienzan a llegar al hogar muy tarde alegando trabajo extra.
Si en tu relación has presenciado la mayoría de estas claves, independientemente de que exista o no infidelidad, queda evidenciado que tienes un problema. Sin embargo, este no es motivo para una ruptura. La confianza y la reconciliación pueden retomar el ritmo de la pareja, ya sea a través de la comunicación o con ayuda de un especialista.