¿Quitarán de su cargo a cuatro gobernadores en México?
La destitución de poderes implicaría arrasar con todo el gobierno estatal en Veracruz, Tamaulipas, Guanajuato y Morelos
MÉXICO – En un giro inesperado para hacer frente a la inseguridad que sigue en incremento a pesar del cambio de gobierno, senadores de la República rescataron una figura jurídica del siglo XIX: la destitución de poderes.
Esto es, quitar al gobernador, al congreso y al poder judicial en los estados donde no hay gobernabilidad y donde el gobierno está completamente superado en sus funciones.
A juicio de los legisladores: Veracruz, Tamaulipas, Guanajuato y Morelos se encuentran en estos casos entre matanzas, desapariciones, balaceras y todo tipo de crimen que revelan que no hay control.
En la opinión de algunos analistas políticos se trata, más bien, de un golpeteo político de la oposición en cada entidad, independientemente de la realidad en la estela de muerte e impunidad que en 2019 acumula tanto e incluye a la mayoría de los 32 estados.
“Es un disputa que sostienen las bancadas de Morena y el PAN, principalmente”, advirtió Paul Ospital, presidente del Instituto Reyes Heroles.
En días pasados, los panistas solicitaron la destitución del gobierno emanado de Morena, que encabeza Cuitláhuac García, en Veracruz, mientras que los morenistas hacen su petición para entidades federativas donde gobierna Acción Nacional, como Guanajuato con Diego Sinhue y Tamaulipas con Francisco García.
“Lo más probable es que en ningún caso avance porque es necesaria la aprobación de dos terceras partes de la Cámara de Senadores y ninguna de las facciones cuenta con dicha proporción a menos que se sumen otros partidos”, agregó Ospital.
Las peticiones no tuvieron buena recepción en el gobierno federal. El presidente Andrés Manuel López Obrador solicitó a los partidos no usar un instrumento legal como “arma política”.
Para el politólogo y periodista Javier Solórzano, la coyuntura del tema debe poner el foco en que en los cuatro estados se viene heredando una crisis de descomposición social.
“Resulta paradójico que en Tamaulipas y Guanajuato, a pesar de que el crecimiento económico sea positivo y que incluso las condiciones de vida sean de las más favorables en el país, sea la inseguridad cotidiana uno de sus más claros signos de identidad”.