Cafú rompió el silencio y habló de forma desgarradora sobre la pérdida de su hijo
Danilo falleció de un infarto en un partido hace casi dos meses
A poco menos de dos meses de la partida de su hijo, quien falleció a causa de un paro cardíaco mientras jugaba futbol con sus amigos, el ex futbolista Cafú por fin pudo hablar sobre el desgarrador momento.
“No sé cómo describir la sensación de tirar tierra al ataúd de un hijo”, dijo entre lágrimas en entrevista para Veja el ex futbolista campeón del mundo con la Selección de Brasil en el 2002.
“Enterrar a un hijo escapa del contexto general de todo lo que siente a lo largo de su vida. Cada cinco días, voy al cementerio a visitar la tumba. No asimilé lo que sucedió. No he tenido el valor para ir a su habitación hasta ahora, mi hijo Wellington fue quien recogió sus cosas y las donó a todas. Nunca volví a pisar la cancha donde ocurrió el infarto. Lloro todos los días solo. Cuando llego a casa, trato de ser fuerte. Después de todo, soy el pilar de mi familia. Usualmente lloro en el tráfico y llamo a mis amigos solo para llorar. Incluso saben y callan, así que lloro, lloro y lloro. El llanto alivia el pecho”, agrego el astro brasileño.
NA REVISTA VEJA, Cafu desabafa: “Não sei descrever a dor de jogar terra sobre o caixão de um filho”. Ídolo nacional que jogou quatro Copas, o ex-lateral fala pela primeira vez da perda de Danilo, de 30 anos, vítima de um problema cardíaco. pic.twitter.com/YoD7JqGCsI
— Juliano Romão (@julianoromao) November 1, 2019
El futbolista también recordó con amargura lo sucedido aquel trágico día.
“Teníamos programado un partido con amigos para el 5, pero yo tenía un viaje de negocios a Estados Unidos y lo anticipamos. Danilo estaba en el mismo equipo que yo. En un descanso, se fue y yo seguí jugando. Tres minutos después noté una conmoción fuera del campo. Por curiosidad, fui a ver qué estaba pasando y me encontré con mi hijo sufriendo convulsiones. Entré en pánico porque tenía su historia cardíaca era delicada. Llamamos a emergencias y dijeron que llegarían en 10 minutos, pero sentía que mi hijo no podía esperar. Cargué a Danilo, lo subí al auto y en cinco minutos llegamos al hospital”, reveló.
“Sufría de aterosclerosis coronaria temprana. La primera aparición de la enfermedad también ocurrió dentro de un campo. Mientras estábamos jugando a la pelota, Danilo tenía 24 años y sintió un fuerte dolor en el pecho. Al día siguiente volvió a sentirse enfermo y condujo solo al hospital, donde se realizó un electrocardiograma. El diagnóstico mostró que había sufrido un ataque cardíaco. Danilo me llamó a las 7 de la mañana y me pidió que fuera al hospital. Le pusieron un stent. Después de eso, la enfermedad parecía controlada. Tenía una cita programada para dos días después de su muerte, solo para colocar un catéter y ver si el stent debería cambiarse”, finalizó.