Coronel y asesora de Pence confirman petición de Trump a Ucrania; demócratas persiguen “soborno”
Los republicanos intentan desacreditar a "testigos estrella"
El teniente coronel Alexander Vindman y Jennifer Williams, asesora en asuntos de Rusia del vicepresidente Mike Pence, se han convertido en los “testigos estrella” de los demócratas en el proceso de juicio político contra el presidente Donald Trump, ya que escucharon personalmente la conversación telefónica en el mandatario y su homólogo de Ucrania, Volodymyr Zelensky, donde se pidió al segundo investigar al exvicepresidente Joe Biden y a su hijo Hunter.
Los republicanos enfrentan complicaciones para desacreditar las declaraciones de Vindman y Williams, quienes confirmaron una y otra vez que la petición del presidente Trump fue “inusual” e “inapropiada”, además de totalmente clara.
“El 25 de julio, junto con varios de mis colegas, escuché una llamada entre el presidente Trump y el presidente Zelensky, cuyo contenido se ha informado públicamente”, indicó Williams en la apertura de su testimonio. “Encontré que la llamada telefónica del 25 de julio era inusual porque, en contraste con otras llamadas presidenciales que había observado, involucraba la discusión de lo que parecía ser un asunto político interno”.
Williams no menciona a Biden en su mensaje inicial, pero los demócratas hicieron la referencia que ella confirmó, además de asegurar que hizo un reporte de aquella conversación, la cual fue entregada al vicepresidente Pence.
El presidente del Comité de Inteligencia, Adam Schiff, preguntó a Vindman si consideró que hubiera “ambigüedad” en la petición del presidente Trump a Zelensky, la cual condicionó el uso de $400 millones de dólares en ayuda militar.
“No hubo”, dijo someramente el teniente coronel. Shiff insistió.
“Estaba bastante claro que el presidente quería que Zelensky se comprometiera a investigar a los Bidens, ¿no?”, cuestionó el demócrata.
“Eso es correcto”, respondió Vindman.
“¿Ese es uno de los favores que pensó que debería interpretarse adecuadamente como una demanda?”, preguntó Schiff.
“Eso es correcto”, atajó el coronel.
“¿Y no hay ambigüedad al respecto?”, insistió el demócrata.
“En mi opinión, no la había”, consideró Vindman.
Schiff, quien lidera a los demócratas en el proceso contra el presidente Trump, utilizó la palabra “soborno” en la audiencia pública, siguiendo una estrategia que ha implementado su grupo ante medios de comunicación.
“El soborno implica ‘quid pro quo’, el soborno implica el condicionamiento de un acto oficial o algo de valor. Un acto oficial puede ser una reunión de la Casa Blanca. Un acto oficial puede ser de $400 millones de dólares en ayuda militar, y algo de valor para un presidente podría incluir investigaciones de su rival político”, dijo explicó el demócrata.
Afirmó que los legisladores buscan decidir si esos hechos ocurrieron en la llamada del 25 de julio.
“No le pedimos a los testigos… que juzguen si se ha cometido un delito o soborno, o si, lo que es más significativo, lo que los fundadores (del país) tenían en mente cuando detallaron el soborno o los delitos graves o delitos menores… Son testigos de hecho”, expresó. “Será nuestro trabajo decidir si ha ocurrido el acto de soborno”.
La decisión de Schiff se dio luego de que el representante republicano John Ratcliffe tenía a su lado una pila de transcripciones para aclarar que ningún testigo describió las acciones de Trump como “soborno”.
El principal republicano del Comité, Devin Nunes, quiso reducir el rango del militar, refiriéndose a él como “Señor Vindman”, tras lo cual recibió una corrección del propio testigo.
“Es teniente coronel”, expresó Vindman.
Nunes también cuestionó a ambos testigos si ellos dieron a conocer la información de la llamada en la que demócratas sustentan el proceso contra el presidente Trump. Williams y Vindman repitieron que elloos no hablaron con la prensa.
“Tenemos un taller de prensa (del Consejo de Seguridad Nacional) y responden a cualquiera de estos tipos de preguntas. No me relaciono con la prensa en absoluto”, dijo Vindman.
El militar inmigrante
Vindman y su hermano gemelo Yevgeny Vindman –quien lo acompañó a la audiencia– inmigró de Ucrania cuando tenía tres años de edad, igual que su hermano gemelo. Este asunto ha sido utilizado por los republicanos para cuestionar su lealtad a los Estados Unidos.
El representante Raja Krishnamoorthi (Illinois) cuestionó al militar sobre su condición de inmigrante y se puso a sí mismo como ejemplo.
“De un inmigrante a otro”, dijo Krishnamoorthi –quien ocupa la posición desde 2017– a Vindman. “Somos el mejor ejemplo de este país”.
Krishnamoorthi, de 46 años, nació en Nueva Dehli, India, y en 2016 sucedió a Tammy Duckworth, quien renunció al escaño.
El representante preguntó a Vindman si creía que en la llamada del 25 de julio, la petición del presidente Trump había puesto presión sobre los ucranianos.
“Los ucranianos necesitaban la reunión. Los ucranianos, posteriormente, cuando se enteraron de que necesitaban la asistencia de seguridad”, respondió Vindman. “Creo que sí”.
La Casa Blanca sobre Vindman
En su cuenta oficial en Twitter, la Casa Blanca cuestionó la veracidad de las afirmaciones del teniente coronel Vindman, señalando que su exjefe expresó preocupaciones sobre su juicio.
“Tim Morrison, el exjefe de Alexander Vindman, testificó en su audiencia que le preocupaba el juicio de Vindman”, expuso la Administración Trump.
Morrison habría dicho en su testimonio: “Tuve preocupaciones sobre el juicio del teniente coronel Vindman”.
Tim Morrison, Alexander Vindman's former boss, testified in his deposition that he had concerns about Vindman's judgment. pic.twitter.com/xwHOt4bsHS
— The White House 45 Archived (@WhiteHouse45) November 19, 2019