Carta a Kobe Bryant: desde aquel día en que te lloramos han sido los peores seis meses
La trágica muerte del ídolo del baloncesto fue el primer gran golpe de escala global en un devastador 2020
Querido Kobe,
Te escribo esta carta a nombre de tus fans y de toda la gente que te admira y te respeta. Como puedes darte cuenta me he inspirado, respetuosamente, en tu corto animado “Dear Basketball”.
“Falleció Kobe”, decía el súbito mensaje enviado por mi compañero editor. Eran las 11:51 a.m. en Los Ángeles y mi primera reacción, igual que la de muchos, fue: “¿Cuál Kobe?”, porque no podía tratarse de ti; no podía ser “nuestro” Kobe.
Hoy se cumplen seis meses de tu muerte, una de las tragedias humanas de mayor impacto en los deportes. A las 9:45 a.m. de ese domingo 26 de enero el helicóptero en el que viajabas a través de la densa neblina se estrelló sobre una colina de Calabasas.
El accidente te arrebató la vida a ti Kobe, uno de los más grandes basquetbolistas, uno de los atletas más globales, pero muy pronto la noticia se puso mucho peor para todos al confimarse que Gianna, tu linda y carismática hija de 13 años, iba contigo en el helicóptero, además de las otras siete personas. Que en paz descansen.
Kobe, el golpe fue muy duro. Después del accidente el mundo se sacudió, te lloró, no solo tus aficionados. En cuanto la noticia se dio a conocer, miles de fanáticos tuyos en Los Ángeles se movilizaron. Muchos se dirigieron hasta cerca de la colina en la que perdiste la vida. Yo lo sé porque hice lo mismo. Fue como que necesitaba verlo con mis propios ojos.
Cuando llegué al pie del cerro, la neblina ya casi se había disipado, pero aún salía humo de los restos del helicóptero. El fuego se apagaba, pero el drama apenas daba inicio.
Al paso de los meses y de la investigación supimos que el accidente pudo y debió evitarse, que tú tomaste la decisión de adelantar el vuelo desde el aeropuerto John Wayne en el Condado Orange para poder llegar a tu academia de básquetbol en Thousand Oaks para ver otro juego de jovencitas, y que el piloto Ara Zobayan, aunque de toda tu confianza, seguramente fue víctima de desorientación por las condiciones meteorológicas adversas.
También supimos que el último mensaje de texto que enviaste desde la nave fue para tratar de ayudar a que la hija del fallecido coach de béisbol John Altobelli, quien estaba en la nave, consiguiera trabajo. En contraste con tu noble corazón, debes saber que algunos alguaciles del Departamento del Sheriff de Los Ángeles se atrevieron ilegalmente a tomar fotos de la escena del accidente y que luego las mostraron en un bar. Patético.
Querido Kobe, el mundo entero ha sido testigo de la increíble fuerza de Vanessa, el amor de tu vida. Su dignidad y entereza nos han admirado a todos, sobre todo en el homenaje organizado para ti y Gigi el 24 de febrero en el Staples Center (¿dónde más?).
Ella nos convenció de que es una gran mujer y madre. Detrás de la letal “Mamba” de la NBA había una verdadera cobra, una mujer de hierro que ya te lleva a ti y a Gianna en la piel.
¿Y sabes? Michael Jordan estuvo ahí para revelar que te quería como a su hermano menor. Esa tarde nadie te lloró más que “MJ”, quien luego nos hizo reír al bromear que su cara bañada en lágrimas sería un nuevo meme.
Kobe, estabámos seguros que tu muerte a los 41 años y en el mejor momento de tu vida era la noticia del año, tal vez de la década. Pero no fue así.
Cosas más grandes han sucedido en los pasados seis meses: surgió una terrible pandemia causada por un coronavirus procedente de China. Alrededor de 16 millones de seres humanos se han enfermado de COVID-19 y cerca de 650,000 han muerto. En Estados Unidos son casi 150,000 decesos.
El coronavirus es la noticia del año, de la década y de lo que llevamos del siglo. Nos tiene a la gran mayoría preocupados, asustados o al menos afectados, porque además sus efectos sociales han sido igualmente letales. Por cierto, la NBA y todas las actividades del deporte mundial se suspendieron por meses. Sin duda que tu liderazgo sería valioso en estos tiempos de pandemia.
Kobe, eso no es todo.
En plena crisis de salud por el coronavirus, el racismo pegó fuerte en tu país. En una esquina de Minneapolis -la ciudad en la que hiciste historia cuando rebasaste a Jordan en puntos anotados- un hombre afroamericano de nombre George Floyd murió por flagrante brutalidad de policías. El asesinato grabado en video fue imposible de dejar pasar.
No exagero si te digo que ha sido una revolución contra el racismo: incontables protestas en todo el mundo, muchos incidentes, mucho fuego, también mucha resistencia porque el racismo ha seguido enseñando su rostro, pero al final hay algunos avances tangibles que habrá que valorar, y para muestra, un botón simbólico:
Sobre las canchas en las que se reanudará la NBA en Orlando la próxima semana se lee “Black Lives Matter” y en los uniformes de los jugadores se leerán en lugar de nombres algunas frases acerca de justicia e igualdad. Sí, tus Lakers son favoritos para ganar el campeonato. Están jugando por ti.
Querido Kobe, han sido los seis meses más tristes y dolorosos. Todos necesitamos hacer un mejor trabajo. Necesitamos aprender un poco de la fuerza de tu esposa para poder sobrellevar la stuación. También nos vendría bien un toque de alegría, como la de Gigi cuando jugaba al básquet o la de tus otras tres hijas, incluyendo la adorable Capri, quien ya dio sus primeros pasos.
Pero sobre todo necesitamos en estos tiempos difíciles de esa disciplina y tenacidad que te hizo el gran campeón que fuiste. “Mamba out”.
5…4…3…2…1
Te extrañamos y te extrañaremos siempre.
Ricardo López Juárez es Editor de Deportes de este diario