Britney Spears no salió de fiesta durante su residencia en Las Vegas
La cantante asegura que durante los cuatro años que vivió en "la ciudad del pecado" ella sólo salió a divertirse en dos ocasiones...
La princesa del pop mantuvo desde 2013 hasta 2017 una residencia en Las Vegas, donde se reinventó como uno de sus mayores reclamos: los 250 conciertos que ofreció le reportaron unas ganancias de $140 millones de dólares, y también le valieron dos premios al mejor espectáculo de la ciudad.
Los motivos por los que las celebridades que se instalan allí temporalmente son la comodidad de actuar cada noche sin verse obligadas a salir de gira y el lujo que rodea a los casinos y hoteles, por no mencionar las fiestas interminables. Sin embargo, Britney Spears apenas tuvo tiempo de aprovechar la escena nocturna de Las Vegas a lo largo de esos cuatro años. Según sus cálculos, solo salió en dos ocasiones y se trató de dos noches tranquilas que no tuvieron nada que ver con la juerga que se corrían los protagonistas de ‘Resacón en Las Vegas’.
“Fue hace tres o cuatro años. Era un club llamado XS y me dediqué a bailar con un amigo“, ha confesado a sus fans durante un encuentro que ha organizado a través de Instagram.
Pese a los rumores que circulan sobre ella, a día de hoy Britney lleva una vida muy tranquila en la que ya no hay cabida para los excesos. Sus grandes aficiones son el baile, el yoga o entrenar junto a su novio Sam Asghari, y por supuesto, mantenerse en contacto con sus leales seguidores a través de Instagram, donde le gusta organizar pases de moda o compartir anécdotas sobre su día a día.