La madre de Meghan Markle está muy orgullosa de su hija, la ahora duquesa de Sussex
Harry demostró también que la relación de su suegra con la familia real está en perfectas condiciones
Tal y como se rumoreaba desde que este sábado fuera vista subiendo a un avión en el aeropuerto de Los Ángeles, Doria Ragland no ha querido perderse este jueves uno de los hitos más especiales en la agenda pública de su hija, la duquesa de Sussex, desde que entrara a formar oficialmente parte de la monarquía británica.
Meghan se encargó de presidir en los jardines del palacio de Kensington la presentación del libro de recetas ‘Together: Our Community Cookbook’, cuya introducción se ha encargado de escribir y que supone un proyecto muy especial para ella, no solo porque sea el primero que afronta en solitario como parte de su nuevo papel institucional, sino porque le ha permitido utilizar su pasión por la comida para una buena causa.
A principios de este año la esposa del príncipe Enrique descubrió la existencia de una cocina comunitaria, ‘The Hubb Community Kitchen’ o ‘La cocina comunitaria del amor’, creada por mujeres de las comunidades afectadas por el incendio de la torre Grenfell con el objetivo de alimentar a aquellos que habían perdido sus hogares, y se propuso ayudar a sus responsables a recaudar fondos para convertirla en una iniciativa permanente a través del mencionado libro, de ahí que el evento de este jueves significara tanto para ella.
La duquesa llegó en coche a la tienda que se había montado en los jardines del palacio para acoger a los invitados y permitirles degustar algunos de los platos que han creado las responsables de esta cocina comunitaria, acompañada de su marido y su madre: Doria iba sentada al lado del chófer que les llevó hasta allí, mientras que Meghan y Harry compartían el asiento trasero. A su llegada, Doria se mostró muy sonriente mientras su hija y su yerno saludaban a los medios allí congregados y, más tarde, se la pudo oír presentándose ella misma a todas las voluntarias de ‘The Hubb Kitchen’ diciendo: ‘Hola, soy la mamá de Meg‘.
Mientras la propia Meghan se dirigía a los presentes y ayudaba a preparar la comida añadiendo especias y dando la vuelta a chapatis y koftas sobre los fogones, Doria se mantuvo en un segundo plano junto al príncipe Enrique, observando con atención a su hija. Cuando en un momento dado una de las presentes que había tenido la oportunidad de trabajar con la duquesa en los últimos meses le aseguró que debía sentirse muy orgullosa de ella, Doria respondió rápidamente: ‘Sí, estoy muy emocionada”. Además, también expresó su predilección por un plato de arroz aderezado con menta y aceite de oliva, asegurando que fue la primera receta que llamó su atención y prometió que intentaría recrearlas todas en su hogar.
“Esto es maravilloso. Estoy tan emocionada como todas ustedes. Y estoy muy contenta de poder ponerle cara por fin a la responsable de cada una de las recetas. ¡Ahora podré decirle a todo el mundo que las conozco! Voy a preparar todos los platos, lo digo en serio”, afirmó.
Su aparición junto a los duques de Sussex ha servido para dejar patente que Doria mantiene una excelente relación con su yerno, con quien se la vio charlando muy animadamente y fundiéndose en un brazo junto a Meghan.
Por su parte, esta última hizo gala una vez más de la naturalidad y simpatía que ha cautivado a los británico saludando con dos besos a sus compañeras de la cocina, repartiendo abrazos y revelando que, al igual que las demás, ella pensaba llevarse parte de las sobras a casa: “Muchas gracias, se vendrá conmigo a casa y será mi cena“, aseguró cuando una de las chefs le entregó un pequeño envase con comida para llevar.