Este es el pueblo donde vive la gente más fea del mundo
El primer domingo de septiembre se realiza el Festival Anual de Feos y en el bar del club celebran la fealdad con mucha cerveza de por medio
Cada pueblo y lugar del mundo se caracteriza por tener costumbres única y peculiares, desde arrojar tomates como se hace en un pueblo de España a esperar que una marmota prediga la llegada de la primavera, como sucede en Pensilvania.
Pero quizás lo más curioso de todo esto es que un pueblo se sienta orgulloso de ser el que alberga más habitantes feos
La pequeña localidad se encuentra en las montañas italianas, en los Apeninos. Se llama Piobbico. Al contrario que sus habitantes es un lugar hermoso, de carácter medieval y lleno de grandes casas de piedra rodeados de frondosos bosques. Es un pueblo de cuento, precioso, que, sin embargo, es famoso por la fealdad de su gente.
Tiene un total de 2.149 habitantes, informa la BBC. ¿Seguro que todos son feos?
Desde 1879 esta ciudad ha sido el hogar del ‘Club dei brutti’ en su idioma, o ‘Club de los feos’, una asociación en la que el lema de los miembros es algo así como “una persona es lo que es y no lo que parece”. Algo que se ha convertido en todo un movimiento mundial.
La llamada ‘Asociación Mundial de Gente Fea‘ cuenta con más de 30.000 miembros en 25 puntos del planeta.
“Nuestro lema es que la fealdad es una virtud, la belleza, esclavitud”, cuenta Giovanni Aluigi, presidente del club durante ocho años.
El club de los feos no solo sirve para calificar a la gente según su aspecto físico, sino que históricamente también funcionaba como servicio de emparejamiento para las mujeres solteras de la ciudad.
“Antes, el club era como una especie de Tinder, que servía para emparejar. Piobbico es un pueblo muy pequeño y todos nos conocemos, la empatía es algo esencial aquí. El club contribuye a que nos ayudemos entre nosotros“, cuenta Benedetta Aluigi, miembro del club.
¿Pero cómo de feo hay que ser para poder ingresar en el club? Los miembros senior del club se encargan de clasificar la fealdad. Lo hacen en dos grupos: “no especificado” y “extraordinariamente feo”. Eso sí, quieren destacar que lo que verdaderamente importa es la celebración de la belleza interior y, sobre todo, no preocuparse por lo que piensan los demás.
Una gran lección para tomar en cuenta.