¿Grande ola de renuncias? No entre estos trabajadores
Los trabajadores latinos experimentaron la devastación del COVID en empleos esenciales que los dejaron vulnerables a la enfermedad, pero fueron ellos quienes mantuvieron la economía en funcionamiento
Septiembre comenzó con el reconocimiento anual de la fuerza laboral en el Día del Trabajo, una celebración de aquellos cuyos empleos mantienen nuestra economía en movimiento. Y ahora, durante el Mes Nacional de la Herencia Hispana, es apropiado reconocer cuán críticos son los trabajadores latinos para la economía y la vida de todos los habitantes de Illinois.
A lo largo de la pandemia de COVID-19 y la reciente escasez de mano de obra, los latinos han estado trabajando. Las tasas de participación en la fuerza laboral entre los hispanos son las más altas comparadas a cualquier grupo racial o étnico. Sin embargo, una parte desproporcionada de los trabajadores latinos están segmentados en puestos esenciales de bajo salario, sin beneficios y con pocas protecciones. A medida que Illinois busque liderar a nivel nacional la planificación y las políticas relacionadas con el futuro del trabajo, mejorar el acceso al empleo de calidad para los latinos es de crucial importancia para la salud general de la economía estatal.
Una constelación única de factores sociales y económicos impacta a muchos trabajadores latinos, haciéndolos empleados indispensables sin protecciones cruciales. Como se evidenció durante el apogeo de la pandemia, los trabajadores latinos experimentaron la devastación del COVID en empleos esenciales que los dejaron vulnerables a la enfermedad, pero fueron ellos quienes mantuvieron la economía en funcionamiento.
A principios de año, mientras se hablaba del fenómeno de la “gran renuncia”, la participación de los latinos en la fuerza laboral era más fuerte que nunca. Es probable que la carga económica a las que se enfrentan las familias hispanas esté impulsando a más latinos a entrar en la fuerza de trabajo, en lugar de salir de ella. Este es un proceso lógico en una comunidad en la que la mitad de los trabajadores ganan 15 dólares por hora o menos. Además, mientras la nación sigue lidiando con un sistema de inmigración quebrado y una crisis de refugiados, Illinois tiene la oportunidad de liderar el acceso a empleos de calidad para todos los que se establecen y hacen su vida aquí.
En el reciente informe, “A ‘Great Resignation’ Not Due to Latinos: Latinos Still Working the Essential Jobs and Earning Too Little”, del Metropolitan Planning Council y The Latino Policy Forum, se indica que los latinos no tienen nada que ver con en el fenómeno de ‘la gran renuncia’ pues continuaron cumpliendo trabajos esenciales, ganando muy poco. Allí se esbozan cinco recomendaciones políticas clave que ayudarán a elevar el nivel de los trabajadores latinos al mismo tiempo que se fortalecerá la economía general del estado:
– Abordar los obstáculos que tienen los latinos para ser propietarios de vivienda y estudiar su declive en el nivel educativo creando vías para que tengan trabajos que paguen sueldos que les permitan ser dueños de inmuebles, y que además tengan la capacidad de pagar la educación de sus hijos más allá de la escuela secundaria.
– Abordar la devastación económica que ocasionó el COVID-19 a los latinos y el papel que desempeñan los trabajadores y los lugares de empleo, reforzando y haciendo cumplir las políticas para garantizar que los mismos estén seguros y no pongan sus vidas en peligro mientras trabajan.
– Permitir que más latinas contribuyan al crecimiento de la mano de obra mejorando los salarios y las prestaciones, incluido el acceso a guarderías asequibles.
– Abordar las enormes y desproporcionadas tasas de COVID en la comunidad latina dando acceso a una serie de beneficios, incluyendo tiempo libre remunerado, para que los trabajadores latinos puedan cuidar de las personas que dependen de ellos.
– Abordar la escasez de empleados, estabilizar la fuerza de trabajo y hacer contribuciones económicas significativas a través de una reforma migratoria que resuelva el proceso por el cual los trabajadores puedan trasladarse y permanecer en los EEUU, incluyendo un camino hacia la ciudadanía para los trabajadores indocumentados. El futuro del trabajo en Illinois sólo es brillante si toda nuestra fuerza laboral tiene salarios, beneficios y protecciones decentes.