Nos pagan menos por ser mujeres
Si bien no necesitamos datos que nos lo recuerden, un nuevo análisis de las cifras del Censo publicado por la National Partnership for Women and Families, destacó que las latinas siguen ganando sólo $0.68 por cada $1 que le pagan a un hombre por hacer el mismo trabajo.
La desigualdad salarial le está costando a las mujeres miles de dólares en ingresos críticos que podrían emplearse para pagar renta, comida, cuidado médico, gasolina y otras necesidades para la familia.
Mírenlo de esta forma. Según los datos a nivel nacional, el salario promedio de una latina es $29,020 al año, mientras que para un hombre es $48,202 al año.
Según el mismo grupo, en Illinois el salario promedio para una mujer que trabaja tiempo completo es $38,638/año, mientras que para un hombre es $50,549. A las latinas les pagan $0.53 por cada $1 que le pagan a un hombre en este estado.
Es discriminación pura.
La economista Adriana Kugler, de la universidad de Georgetown también destacó en un artículo que en promedio una mujer en Estados Unidos pierde $400,000 a lo largo de toda su vida debido a la brecha salarial. Pero para una latina esa cifra asciende a $800,000.
Imagínense lo que podría hacer una mujer con todo ese dinero, empezar un negocio propio, darle a sus hijos todo lo que necesitan, crear empleo para otras mujeres y hombres, viajar, construir una casa…
Mientras esperamos a que los legisladores aprueben algún tipo de ley contra esta discriminación, tipo la Paycheck Fairness Act, se nos va a ir la vida entera.
Lo ideal sería que hubiera un cambio social, pero ¿qué se puede hacer mientras tanto?
Muchas veces nos preguntamos ¿por qué si un hombre está haciendo el mismo trabajo que una mujer, tiene la misma experiencia, habla el mismo número de idiomas, o tiene el mismo entrenamiento, gana más?
Algunas personas piensan que es porque esos hombres se saben vender, inflan sus logros, se pavonean y se mercadean 24 horas al día. Otras piensan que es porque tuvieron mentores que les enseñaron a darse a valorar.
Pero lo cierto es que el tema de exigir un salario justo tiene que ver con el hecho de saber negociar. Y muchas mujeres son castigadas cuando intentan hacerlo y tienen miedo.
En un artículo escrito por Jessica Bennett, editora de Tumblr, ella explica que las razones pueden estar relacionadas con el miedo al rechazo, la difícil situación económica, la reticencia de las mujeres, en general, a tomar riesgos, y la idea internalizada de que “pedir algo” no es “femenino”.
De cualquier manera, para aquellas que estén ensayando un guión o meditando sobre la idea de exigir un ajuste salarial o perseguir otra posición en su carrera, en su artículo Bennett menciona como consejos ser positiva pero persuasiva, usar la táctica y no dar una cifra salarial de entrada, y venderse a sí misma en el sentido de destacar sus logros, su experiencia y su talento.