“Chicago lo quiere más”
Sigue vivo el sueño de los Cubs, que buscan llegar a una Serie Mundial por primera vez desde el fin de la Segunda Guerra Mundial
Los Cachorros celebraron a lo grande el martes tras eliminar a los Cardenales de San Luis, la primera serie de playoffs ganada por Chicago en Wrigley Field. Crédito: Getty Images
Alrededor de la eterna y sufrida sequía de títulos de los Cubs de Chicago, un histórico equipo que no ha ganado una Serie Mundial desde 1908, siempre hay lugar para los mitos y la superstición.
Ahí han estado, entre otras, la “maldición de la cabra” de 1945 y el episodio de Steve Bartman en 2003, dando paso a una nueva debacle de postemporada de los Cubs. Por eso, los Cachorros han decidido dejar que la pelota bateada por su joven cañonero Kyle Schwarber el martes contra los Cardenales, un bombazo de jonrón por el jardín derecho, se quede arriba de la enorme pizarra que tiene encima el anuncio de Budweiser.
El club quiere que esa pelota sea una especie de amuleto, un rosario, para que la buena fortuna y el sueño de los Cubs no se acabe.
El equipo del norte de Chicago, que ya ha dejado a su paso a los dos mejores clubes de la temporada regular -Pittsburgh en el comodín y San Luis en la Serie Divisional-, está de regreso en una serie final de la Liga Nacional.
Chicago visita este sábado a Dodgers de Los Ángeles o Mets de Nueva York(al cierre aún no se había definido la serie entre ellos) en el inicio de la Serie de Campeonato, al mejor de siete juegos, y ese hecho es por sí solo muy poderoso.
Los Cubs pelearán por asistir a la Serie Mundial, algo que no han logrado desde 1945, el año en que terminó la Segunda Guerra Mundial, cuando cayeron ante los Tigres de Detroit en siete partidos.
La última vez que Chicago disputó el campeonato del Viejo Circuito fue en 2003, vencido por los Marlins de Florida en siete juegos, cuando Bartman, un aficionado del equipo, impidió que Moisés Alou atrapara un elevado de foul junto a los asientos del lado izquierdo.
Pero hay algo acerca de estos Cubs de 2015 que hacen sentir un ilimitado optimismo para sus seguidores en el área de la Ciudad de los Vientos y muchos más esparcidos por todo el país.
Será el fuego que transmiten sus jóvenes estrellas, quienes actúan sin complejos y sin mirar a los traumas del pasado, o la confianza que produce su manejador, el siempre exitoso Joe Maddon, un hombre de 61 años que usa lentes de pasta y que tiene el alma más juvenil del beisbol, o la fuerza de Jake Arrieta, un lanzador tan dominante que hace recordar las glorias de Madison Bumgarner con los Gigantes de 2014 o de Orel Hershiser con los Dodgers de 1988.
Los Cachorros y sus fans celebraron el triunfo sobre los Cardenales como pocas veces se había visto en una Serie Divisional de las Ligas Mayores.
El sueño se ha ido alimentando con cada jonrón de Anthony Rizzo o Kris Bryant, con cada engarce de los infielders Addison Russell o Starlin Castro, y con cada ponche de los relevistas Pedro Strop o Héctor Rondón.
En la Serie Divisional, Chicago cañoneó a San Luis con 10 cuadrangulares. Quince de las 20 carreras del equipo llegaron por esa vía, incluyendo el bombazo imponente de Schwarber en el cuarto juego, cuando los Cubs amarraron una serie en Wrigley Field por primera vez en la historia del mítico estadio.
“Felicitaciones a los @Cubs – incluso los fans de los @WhiteSox están apoyándolos!”, posteó el presidente Barack Obama, un conocido aficionado de los Medias Blancas, en su cuenta de Twitter.
En realidad, casi todo el país está con los Cubs, un equipo querido y por el que muchos sienten simpatía, acaso por tantos sufrimientos y tiempos difíciles que les han tocado.
Pero tres años después de haber tenido 40 derrotas más que victorias, lo impensable está ocurriendo, y tal vez la espera de volver a un Clásico de Octubre pronto llegará a su final.
En las playeras de los Cubs tras el triunfo del martes se leía “Chicago lo quiere más”. Eso es innegable. Ningún club o base de aficionados desea y necesita más de un campeonato.
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La Serie de Campeonato
Los Cubs abren la serie de campeonato como visitantes (al cierre estaba por definirse si en Los Ángeles o Nueva York) el próximo sábado 17 y domingo 18 de octubre (TV por TBS). En el Wrigley Field jugarán al menos los juegos 3 y 4 el próximo martes 20 y miércoles 21 de octubre (TV por TBS).
@Cubs
#Cubs ganan una serie de postemporada en el Wrigley Field por primera vez
