Organizaciones en Illinois peligran por recortes y atorón del presupuesto
Una de las agencias sin fines de lucro que se vería obligada a cerrar sus puertas es el Centro de Tratamiento Latino que ha ayudado a la comunidad hispana con problemas de adicción por más de 30 años
Desde 1986, el Centro de Tratamiento Latino ha otorgado ayuda y consejería a cientos de hispanos de bajos recursos que sufren de problemas de alcoholismo y/o drogadicción. Hoy, este centro sin fines de lucro corre el peligro de tener que cerrar sus puertas a causa de recortes presupuestarios de Illinois que está afectando no solo a éste centro sino que a cientos de otras organizaciones sin fines de lucro en el estado.
Los senadores estatales Iris Martínez (D-Chicago) y Michael Noland (D-Elgin), realizaron una conferencia de prensa desde el Centro de Tratamiento Latino, conocido en inglés como el Latino Treatment Center, junto a su directivo este pasado lunes en Elgin, con el fin de hacer un llamado al gobernador de Illinois Bruce Rauner y a su administración a que se llegue a un acuerdo para balancear el presupuesto estatal sin tener que recortar más fondos que afecten a programas con fines de ayuda social.
“El personal de este Centro ha dado mucho de sí. Desafortunadamente están en una situación donde han tenido que solicitar préstamos, algunos han trabajado con un salario reducido, hasta incluso algunos han continuado sus labores sin pago”, dijo el senador estatal Noland, añadiendo que hay otras organizaciones con este tipo de servicio que están pasando por la misma crisis. Es decir, las organizaciones han continuado otorgando servicios a la comunidad pero no han recibido los pagos del estado por dichos servicios. Por ejemplo, el estado tiene una deuda de $812,000 con el Centro Ecker en Elgin, y de $220,000 con el Centro Comunitario de Crisis, entre otros.
Adriana Trino, directora del Centro de Tratamiento Latino, explicó que al comienzo del año fiscal 2016 el Centro recibió un corte de un 20% a un presupuesto que ya era limitado. “Como resultado de estos recortes, hemos estado funcionando en un déficit que ha limitado a implementar nuevos programas para nuestros clientes”, dijo.
Trino añadió que el Centro, el cual tiene tres instalaciones, una en Elgin y dos en Chicago, recibió recientemente parte de los fondos restantes ($59,000) que faltaba para cerrar el año fiscal 2016, pero aseveró que aún no está segura si podrán continuar abiertos en los próximos meses. Otro recorte significaría el cierre de la agencia, la cual asiste entre 160 a 180 latinos con problemas de adicción en los condados de DuPage, Cook y Kane, dijo.
Trino explicó que su agencia ya ha tenido que reducir su personal a la mitad de 12 a seis personas y que tiene a profesionales con postgrados ganando un sueldo de $25,000 al año.
“Nuestro personal es muy dedicado. Somos apegados a lo que hacemos y trabajamos mucho con la comunidad. Nosotros no trabajamos por el dinero, trabajamos por la gente”, dijo. “Mi personal se ha sacrificado trabajando horas largas, asistiendo en diferentes labores dentro de la agencia”.
La senadora estatal Martínez dijo sentirse optimista a que se llegará a un acuerdo para el 31 de mayo (ultimo día de la sesión parlamentaria del 2016). Según ella, Rauner muestra señales de estar “bajando un poco el tono” y que puede que él y su administración lleguen a un acuerdo. “El [Rauner] tiene que ver que hay centros como estos que son pequeños pero que hacen mucho para las comunidades. Hay un problema serio de adicción en el estado por lo que necesitamos sentarnos y negociar con el gobierno y encontrar una solución”, dijo Martínez. “Estamos trabajando en buena fe, para llegar a un acuerdo. No podemos pasar otro año sin un presupuesto.”
La concurrencia del alcoholismo y la drogadicción entre los hispanos es más alta de lo que la gente se imagina, dijo la consejera del Centro de Tratamiento Latino, Carolina Pombo. Los latinos que buscan ayuda en el centro son de bajos recursos, algunos no hablan bien el inglés y aunque sean bilingües muchos se sienten más cómodos acudiendo a consejeros de habla hispana. “Ellos no tienen un lugar a donde ir, en realidad. Ellos no tienen opciones, en español [centros] no hay opciones. Muchos les tocan venir de suburbios lejos a nuestras instalaciones”, dijo Pombo.
“Ya sea por choque cultural, desprendimiento de sus familias, o por muchas razones, el problema de alcoholismo y drogadicción es más grande de lo que la gente piensa. El problema es que la gente hispana no pide ayuda y muchos no tienen los recursos para seguir un tratamiento”, dijo la consejera.
Orlando Miranda, presidente de la junta directiva del Centro, dijo: “quisiera protestar por este impasse que ha ocurrido. Pareciera que estuviésemos en la secundaria. Este centro es uno, y hay miles de otros. Los contribuyentes seguimos pagando impuestos pero el estado no está otorgando lo que promete dar. Esto es absurdo… esta no es la forma que un gobierno debe ejercer”, aseveró.