¿El mejor sector para el empleo? Construcción
La posición con respecto a la inmigración puede influir negativamente en la demanda de trabajo
Hasta 6.700 empleos nuevos creó la construcción el mes pasado, según las cifras del departamento de Trabajo. La Asociación General de Contratistas de América (AGCA) discrepa. Según sus cálculos fueron 11,000 lo que lleva a este sector a su mayor nivel desde diciembre de 2008.
A pesar de que los datos del Gobierno son más consevadores, con el aumento registrado hasta ahora el empleo en la construcción ha crecido más que en cualquier otra industria. Educación y servicios de salud mejoraron sus nóminas un 2.7% frente al 3% de la construcción. Adicionalmente, y según los contratistas, los salarios han crecido un 3.2%, sustancialmente por encima de lo que ha pasado en otros sectores. Es más, faltan trabajadores cualificados, según la AGCA.
Es el sector privado el que está a cargo de este aumento de demanda de trabajo mientras que el sector público está rebajándola. El problema es que en muchas ciudades no dejan de construirse edificios (residenciales y comerciales) los gobiernos locales, federales y estatales no están invirtiendo en infraestructuras. La austeridad y la disciplina presupuestaria impuesta tras la crisis sobre todo por parte de un Congreso no dispuesto a aumentar el déficit, han secado los fondos para estas obras. El presidente electo, Donald Trump, quiere hacer grandes inversiones en infraestructuras en los próximos años que los congresistas republicanos parecen dispuestos a apoyar en esta ocasión. Es algo que creará incluso más trabajos.
La latina es una de las comunidades que más trabaja en la construcción. Es algo en lo que hay una cierta tradición porque como dice Carlos Martín, experto en construcción y arquitectura del Urban Institute, la construcción es una ilustración tangible de la aportación laboral de los trabajadores inmigrantes. Estos, recuerda Martín, “normalmente hacen trabajos peligrosos a cambio de bajos ingresos y debemos reconocer las contribuciones que estos hacen a la economía”.
Unos 2.2 millones de trabajadores de la construcción son nacidos en el extranjero, casi un 33% del total y según los cálculos de Pew Research Center, en 2014 el 15% de los trabajos en la construcción los desempeñan inmigrantes indocumentados. En total, los indocumentados eran ese año el 5% de la fuerza laboral del país.
Esta situación puede poner en dificultades a un sector que espera una renovada carga de trabajo porque si ya hay problemas para cubrir puestos de trabajo cualificado, esta crisis se intensificará si desde la presidencia se mantiene la promesa hecha al electorado de deportar inmigrantes por millones y construir barreras para la llegada de personas que hacen estos trabajos.
Además de complicar los planes de las constructoras, esta falta de mano de obra y lo que el futuro depara puede elevar aún más los salarios pagados en la construcción.