Trump afirma que está abierto a una reforma migratoria
El presidente considera que es el "tiempo correcto" si republicanos y demócratas logran un acuerdo
WASHINGTON.- Consciente de la avalancha de críticas a su nueva política migratoria, el presidente Donald Trump afirmó este martes que, a su juicio, es el “tiempo correcto” para una reforma migratoria que permita algún tipo de legalización para la población indocumentada en Estados Unidos.
“Creo que el tiempo es correcto para una reforma migratoria, siempre y cuando ambos lados cedan” en sus posturas, dijo Trump horas antes de su primer discurso ante una sesión conjunta del Congreso.
Trump hizo esas declaraciones, según presentadores de las principales cadenas de televisión, que incluyó a Univisión y Telemundo, que participaron en un almuerzo con él.
Trump refería a la actitud entre demócratas y republicanos que durante décadas ha impedido la aprobación de una reforma migratoria integral.
Un funcionario de alto rango de la Casa Blanca, que pidió el anonimato, precisó que Trump apoya algún tipo de legalización que incluya permisos de trabajo temporales pero no una vía a la ciudadanía, como han exigido grupos defensores de los inmigrantes.
Sin embargo, para que eso ocurra ambas partes en el debate migratorio tendrían que “suavizar sus posturas”.
El tema podría surgir durante el discurso de esta noche pero la Casa Blanca no quiso confirmarlo.
Se calcula que hay unos 11.1 millones de inmigrantes indocumentados en EEUU, la mayoría proveniente de México y Centroamérica, y qué hacer con ellos ha sido objeto de fuertes pugnas partidistas en el Congreso.
Trump ganó la presidencia en 2016 con promesas de construir un muro en la frontera con México y una deportación masiva de los inmigrantes indocumentados. Sus órdenes ejecutivas del pasado 25 de enero han dado luz verde a redadas en todo el país, desatando críticas de la comunidad inmigrante, aunque la Casa Blanca insiste en que la prioridad es deportar a “criminales”.
Durante la contienda, Trump habló vagamente de permitir que ciertos indocumentados –“los buenos”- puedan regresar al país mediante una vía legal.
Por ahora, Trump mantiene en vigor el programa de “acción diferida” (DACA) de 2012, que ha protegido de la deportación a unos 750,000 jóvenes que vinieron ilegalmente de niños a este país.
La reacción entre grupos defensores de los inmigrantes ha sido prácticamente unánime, de “ver para creer”, además de que exigieron un cese a las deportaciones.
El legislador republicano por Florida, Mario Díaz-Balart, dijo sentirse “alentado” por los comentarios de Trump porque el sistema migratorio “está roto” y es necesario “encontrar una solución de sentido común”.
El congresista, que representa a un distrito con alta población inmigrante, calificó como algo “extremadamente decepcionante” que muchos en los extremos de izquierda y derecha en el espectro político “se apresuren a criticar la voluntad del presidente para trabajar con el Congreso para corregir nuestro sistema migratorio”.
“Permanezco comprometido y listo para trabajar con la Casa Blanca y colegas congresistas” de ambos partidos, puntualizó Díaz-Balart.
En 2013, el llamado “Grupo de los Ocho” en el Senado -cuatro demócratas y cuatro republicanos- negoció y aprobó una reforma migratoria integral, pero la Cámara de Representantes jamás tuvo siquiera un debate.
Cero detalles
Más adelante, en una sesión informativa con la prensa escrita, incluyendo este diario, dos funcionarias de la Casa Blanca explicaron que en el discurso, cuyo lema será la “renovación del espíritu estadounidense”, Trump delineará su visión para el futuro del país y lo que ha hecho hasta ahora para cumplir sus promesas electorales.
Las fuentes indicaron que Trump hablará de la seguridad fronteriza, pero se negaron a precisar si el mandatario ofrecerá alguna propuesta específica sobre una reforma del sistema de inmigración.