Draft NFL 2017: Siete contrapuntos, ironías o de plano estupideces de la primera ronda
Browns tiemblan, 49ers ganan en la mesa, Raiders no se toman en serio, un 'Taco' en Texas y Steelers van por Brady
Fascinante. Así fue la primera ronda del Draft 2017 de la NFL. Estas son algunas curiosidades que posiblemente pasen a la historia.
Cleveland, alerta de nuevo fiasco
La nube negra que ha acompañado a los Cleveland Browns por tantos y tantos años no se alejará pronto. Incluso cuando el equipo escoge con la primera selección del Draft al llamado mejor prospecto, las dudas salpican por todos lados.
Como la mayoría de los expertos esperaban, Cleveland tomó a Myles Garrett, de Texas A&M. Pero muy pronto algunos levantaron una ceja cuando John Gruden, el brillante exentrenador y sensacional analista de ESPN, examinó las debilidades del ala defensivo.
Con numerosos videos, Gruden demostró que Garrett no termina las jugadas y deja de correr; vamos, el explosivo atleta no juega con la pasión que uno esperaría condición absoluta para ser el primero de un Draft.
Tal vez Garrett mejorará en ese aspecto. Pero, ¿qué tal si no? ¿Qué tal si con el dineral que los Browns le pagarán nunca llega a jugar con el hambre y la ferocidad que deben complementar su increíble talento?
Lynch se comió al oso
De Jay Cutler a Mike Glennon. ¿De Mike Glennon a Mitchell Trubisky?
Los Bears de Chicago fueron los primeros en animar el Draft el jueves al orquestar un abultado cambio para reclutar al mariscal de North Carolina. Esto, apenas mes y medio después de que le mostraron el dinero (3 años, $43.5 millones) al exBuccaneer Glennon para empezar la era post-Cutler.
Los Bears deben haber estado seguros de que San Francisco, con la segunda selección global, iba a tomar a Trubisky. Por eso cedieron a los 49ers la selección 3, la 67 y la 111 de este Draft, y una 3ª ronda de 2018 para subir sólo una posición. Ridículo el precio pagado por un equipo con tantas necesidades como lo es Chicago.
John Lynch, aquel gran golpeador de Tampa Bay y ahora nuevo gerente general de los 49ers, sacó la miel, jugó con los Bears y los puso a invernar en plena primavera.
Un pitcher ‘wild’
Tan costoso o más fue el precio que los Chiefs pagaron por su propia apuesta: la de encontrar a su quarterback del futuro cuando decidan que Alex Smith ya no siga.
Para subir del turno 27 que le correspondía hasta el 10, Kansas City le dio a Buffalo su selección de primera ronda, una de tercera y su primera del próximo año. Patrick Mahomes, de Texas Tech, no era visto como un prospecto “top ten”, y muchos ni siquiera lo contemplaban en la primera ronda porque es un pasador que ha demostrado que juega a veces descontrolado, fajador y hasta “alocado”.
Andy Reid debe sentirse muy seguro de que puede pulir a Mahomes, y claro, las 734 yardas que el hijo del expitcher de Grandes Ligas del mismo nombre lanzó en octubre contra los Sooners de Oklahoma (en 88 pases intentados) vaya que impresionan.
Texans debían un favor
En el carrusel que es un Draft, donde la decisión de un gerente general termina afectando a varios más, siempre hay equipos que operan bajo mucha presión. Eso le pasó a Houston, que no pudo hacer realidad la adquisición del ahora comentarista Tony Romo y entonces necesitaban quarterback con urgencia.
Los Texans mandaron a Cleveland su selección en el turno 25 para subir al 12 y jalaron del gatillo por el campeón nacional y pesadilla de Alabama, Deshaun Watson. Como real compensación, los Texans agregaron en el paquete con destino a la ciudad de Ohio su primera selección de 2018.
Buen negocio para los Browns, que merecían un poco de cariño luego de que le hicieron el favor a Houston de recibir hace varias semanas a Brock Osweiler, con sus pies planos y su inflado contrato.
Se emborrachan antes de la fiesta
Nadie puede negar que los Raiders son un nuevo protagonista de la NFL y tal vez contendiente para llegar al Super Bowl. Pero, ¿por qué en un Draft repleto de talento defensivo arriesgar su primera selección por un jugador que tal vez no esté disponible? ¿Por qué tomar a la ligera los recursos que se tienen y seleccionar a un atleta que en el mejor de los casos tiene un carácter cuestionable?
Oakland/Las Vegas escogió con la selección 24 al esquina Gareon Conley. Mientras las habilidades de Conley no se discuten, el exjugador de Ohio State tiene encima una acusación de la Policía de Cleveland de que violó a una mujer, si bien no se le han levantado cargos.
Conley niega el crimen y dice que entregará una muestra de ADN para colaborar con las investigaciones policiacas. Este es un tema serio, pero los Raiders, tal vez un poco emborrachados tras por fin gozar una temporada, no terminan de serlo.
Y venga la publicidad al ‘Taco’
Su real nombre es Vidauntae Charlton. Pero su apodo se ha convertido en su nombre, y su apodo promete ser incomparable y lucrativo: “Taco”.
Los Cowboys seleccionaron a Taco Charlton, liniero defensivo de Michigan, en la primera ronda, para tratar de seguir lo de hace un año cuando se robaron el Draft con Ezekiel Elliott y Dak Prescott.
Taco Charlton no es el mejor liniero defensivo de este Draft (hay varios excelentes), pero si el nuevo Cowboy puede establecerse en Dallas le van a llegar contratos publicitarios, a lo mejor algunos de ellos de cadenas de comida. El mundo entero adora los tacos y no se diga en Texas.
Watt vs. Watt
Los Steelers de Pittsburgh visitarán a los Texans de Houston el Día de Navidad, en lo que podría ser un adelanto de playoffs. Ese partido en Houston será al menos un duelo fraternal.
Pittsburgh seleccionó en la primera ronda al linebacker T.J. Watt, de la Universidad de Wisconsin. Se trata del hermano menor de J.J. Watt, el alma y corazón de los Texans.
Los Steelers no estaban del todo satisfechos con su cuerpo de linebackers, en el que han invertido varias primeras selecciones recientes, y saben que el asombroso James Harrison cumplirá 39 años la siguiente semana.
Pittsburgh tal vez aprendió después de todo que a los Patriots no se les ganan sin presionar en serio a Tom Brady, y claro, en la AFC no se llega al Super Bowl si no se le gana a Nueva Inglaterra.