Si quieres estar sano, esta es la frecuencia con la que debes cambiar las sábanas
Aunque te dé flojera, cuando leas esto, de seguro querrás cambiarlas de inmediato
Una de las labores domésticas que la mayoría odiamos es tender la cama, y peor aún, tener que cambiar las sábanas, ponerlas a lavar y a secar, algo que aunque no lo creas, debes de hacer más seguido de lo que crees por tu propio bien.
No hay nadie que no disfrute meterse a la cama por la noche y disfrutar de unas sábanas frescas y que desprendan un aroma agradable, algo que solo se goza el primer día que se cambian, y a pesar de esta sensación, muchos prefieren dormir durante semanas e incluso meses, con las mismas.
Este hábito preocupa a cierto grupo de médicos, pues este hábito “sucio” trae problemas de salud que muchos desconocen.
Para empezar, las sábanas sucias son el hogar ideal de distintas especies de hongos, sobre todo cuando hace calor o está húmedo el ambiente.
Una de las cifras más impactantes es que en clima templado, los seres humanos somos capaces de producir cerca de 26 galones de sudor cada año, por lo que sin duda, la ropa de cama se vuelve el “medio de cultivo fúngico ideal”. A esto, habría que agregarle que tanto las almohadas de pluma como las sintéticas que tienen un promedio de vida de entre 1,5 y 20 años contienen cerca de 16 especies diferentes de hongos.
Los hongos y las bacterias surgen no solo del sudor, sino también de las células muertas de la piel, saliva, mucosidad, excreciones, así como del polvo, la suciedad, heces y de células animales, si en tu caso tienes mascotas.
Al combinarse todos estos elementos, los efectos podrían sentirse alrededor de la primera semana, provocando síntomas de alergia, como estornudos y dificultad para oler, así como resequedad en la garganta, molestias que se agravan en personas que padecen asma o alergias considerables.
Entonces, por salud, ¿cada cuando es recomendable cambia las sábanas? Una vez a la semana, indica el microbiológo de la Universidad de Nueva York, Phillip Tierno.