Le va a pedir matrimonio y no puede salir peor
La suerte es un factor determinante, pero también es vital controlar el pulso y mantener los nervios en situaciones de presión
No hay nada más bonito y emocionante que planear una pedida de matrimonio.
Obviamente, la situación requiere que todo salga según lo previsto. Tener todo listo es fundamental, el lugar, la hora, los detalles…todo tiene que estar controlado para que ella diga “sí, quiero”, ¿no es cierto? Pero, quizás lo más difícil sea controlar los nervios.
Eso es justamente lo que le falló a este hombre de Misouri.
Seth Dixon, se arrodilló frente a su novia, Ruth Salas, cuando accidentalmente se le cayó el anillo de $ 3,000 dólares en el estanque.
Todo marchaba bien hasta que sacó el anillo de la caja. El anillo primero cayó al puente, para deslizarse después entre las tablillas de madera.
La pareja procedió a rastrear el agua turbia para buscar en el fondo del estanque, pero no hubo suerte. Incluso contrataron a un hombre con un detector de metales para buscarlo, pero tampoco lo encontraron.
Hasta 25 personas, amigos y compañeros de su iglesia trataron de ayudarlos. Un fotógrafo capturó el momento en que ellos también estaban en el estanque buscando el anillo, pero no tuvieron éxito.
A pesar del contratiempo, Seth y Ruth ya están muy comprometidos. Con anillo y sin anillo, ella dijo “sí quiero”.