A dormir lo suficiente tras el cambio al horario de verano
El cambio al horario de verano también cambia las horas de sueño
Aunque tenga una jornada muy ajetreada y miles de cosas por hacer, tantas que el día no le alcanza, considere que las horas de sueño no son negociables.
Un adulto debe dormir de manera continua entre 6 horas y media y 9 horas, de manera que debe ajustar su ritmo de vida para que sus actividades le permitan dedicar ese tiempo al descanso, plantea Guadalupe Terán Pérez, coordinadora de atención en la Clínica de Trastornos del Sueño de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) Iztapalapa.
“Disminuimos nuestras horas de sueño porque no lo consideramos importante; es como lo más sacrificable.
“Además, vivir en una ciudad tan estresante, que está activa las 24 horas los 365 días del año, hace que estés más tiempo despierto, y si a eso sumamos el uso de la tecnología y si estás sobrestimulado con el celular, las tabletas o la televisión, vas a ir alargando el tiempo que estás despierto”, explica la especialista.
Cuando esto no ocurre, ocurren diversas alteraciones conductuales, subraya.
“Lo primero que vamos a ver es un cambio de ánimo, irritabilidad, mayor impulsividad, incluso agresividad, así como bajo rendimiento y productividad. Por ejemplo, se cometen más errores y aumenta el riesgo de accidentes automovilísticos”, indica.
Además, un sueño deficiente también provoca un aumento de presión en el cuerpo, lo cual aumenta los riesgos a la salud.
“El aumento de la presión en nuestro cuerpo nos hace más propensos a presión alta, diabetes, infarto o accidentes cerebrovasculares. Otro aspecto es la obesidad, porque cuando no dormimos bien, tendemos a comer más y tardamos más tiempo en sentirnos saciados”, expone.
Por otro lado, Terán Pérez destaca que la mala calidad del sueño también afecta a los niños, principalmente aquellos que cursan estudios de primaria.
“Los niños mexicanos están durmiendo dos horas menos de lo que se duerme en otros países; están durmiendo en promedio siete horas y media cuando debería estar durmiendo de nueve a once horas y esto se ha relacionado con diferentes trastornos, uno de ellos la obesidad”, agrega.
De acuerdo con la especialista, es importante que los padres estén pendientes de las horas que dedican sus hijos a dormir y si detectan alguna situación anormal, acudan a consulta clínica con los especialistas del sueño.
En el marco del Día Mundial del Sueño, que se celebra el 16 de marzo, estas recomendaciones ayudan a dormir mejor:
– Evite celulares, tablets o pantallas media hora antes de dormir.
– Mantenga horarios regulares.
– Mida o evite el consumo de azúcar y cafeína en la noche.
– Si al despertar está cansado o si tiene su ciclo de sueño alterado, acuda con un especialista.
– Roncar es un trastorno del sueño.
– Dormir es un proceso natural, no se recomienda tomar pastillas para inducir el sueño.
Por Evlyn Cervantes Silva, Agencia Reforma