Un grupo de la caravana migrante sigue hacia el norte y recibe mensajes de apoyo
La atención de Donald Trump y de medios estadounidenses la pasada semana causó la dispersión de parte de la caravana, pero no todos han cejado en su intento de venir al país del norte. Se preparan campañas para apoyarlos.
La Caravana Via Crucis Migrante que el presidente Donald Trump invocó la pasada semana como razón para ordenar la Guardia Nacional a la frontera, se ha visto dividida y disminuida en el camino pero no ha desaparecido: un grupo sigue su camino en dirección al norte, donde ya se realizan esfuerzos y campañas para apoyarlos.
Según portavoces de Pueblo Sin Fronteras, que organizó la caravana, unas 650 personas se siguen moviendo por México, entre ellos muchas madres con hijos menores de edad que escaparon de la violencia en Honduras. No está claro si todos se dirigen hacia Estados Unidos, pero los organizadores hablan de “3000 kilómetros restantes” entre donde están los refugiados y su “destino final”.
Entretanto, grupos de Estados Unidos están recabando fondos y organizando a la comunidad para ofrecer refugio en sus casas a miembros de la caravana o al menos enviarles mensajes de texto de apoyo y bienvenida.
“Cuando Trump cierra sus puertas, los estadounidenses están abriendo las suyas”, reza la campaña lanzada por We Belong Together y el grupo Alianza Nacional de Trabajadoras Domésticas, para buscar personas que puedan brindarse a dar la bienvenida en sus hogares a algunos de estos migrantes.
Directivas de estos grupos leyeron una serie de textos enviados por personas en Estados Unidos, destinados a migrantes de la caravana. que en su mayoría vienen de Honduras.
Pueblo Sin Fronteras y Undocumedia también lanzaron una campaña de recaudación de fondos para los gastos de la caravana.
Entretanto, el periódico El Universal de México reportó que el embajador de Honduras en México, Alden Rivera, marchó en solidaridad con unos 150-200 participantes de la caravana en la ciudad de México.