Conoce los beneficios de la calabaza
Y descubre también de dónde proviene su "tétrico" origen
A las brujas, esqueletos, murciélagos, arañas y muertos vivientes se les unen las calabazas para conformar la plana mayor de los personajes terroríficos que reviven para esta época de Halloween. ¿Cómo llegó este vegetal a hacer parte de esta banda? ¿Sería por la mala fama que le han hecho los niños, que la desprecian casi siempre sin siquiera probarla?
Nada sería más injusto, pues la calabaza tiene muchas cualidades: es una buena fuente de fibra, lo cual favorece la digestión; y es bastante nutritiva: rica en vitaminas (betacaroteno y complejo B, por ejemplo), minerales (potasio, fósforo, hierro y zinc) y antioxidantes (vitamina C y E).
Así que vale la pena incluirla con frecuencia en el menú familiar; con ella se pueden preparar cremas, sopas, puré, relleno de ravioles o canelones. Como tiene ese toque dulce, también es un buen ingrediente para elaborar muffins y waffles, que puede ofrecer en su fiesta de Halloween.
Entonces, su historia terrorífica proviene de otra parte, desde la antigua fiesta de Samhain, la cual celebraban los celtas. Ellos solían utilizar nabos vaciados que llenaban con carbones al rojo o velas como faroles para guiar a los espíritus. La versión americana de la calabaza se dio en el siglo XIX, con los inmigrantes irlandeses que llegaron a Estados Unidos con sus tradiciones y leyendas.
Manos creativas
Las calabazas talladas con expresiones terroríficas o cómicas son un buen elemento decorativo para cualquier fiesta de niños o adultos, ya sea como un farol o como recipiente de dulces para la entrada, un pasillo o la mesa del comedor.
- Para hacer una, necesita la calabaza, un cuchillo, una cuchara, un plumón, una vela pequeña o dulces.
- Marca un círculo alrededor del tallo, como haciendo una tapa.
- Corta con el cuchillo -y un poco de fuerza-.
- Gírala una poco para despegarla.
- Con la cuchara, saca las semillas y hebras, sin quitar la pulpa.
- Marca con el plumón la cara: los ojos, la nariz y la boca, aquí puede aprovechar su creatividad para hacer el rostro que quiera. Puede ser el tradicional con ojos y nariz en triángulo y la boca en zigzag. O ponerle la cara de Jack Skellington, uno de los personajes de Tim Burton: dos ojos grandes, dos agujeros para la nariz más pequeños y una sonrisa llena de dientes cuadrados.
- También puede ser una que está indispuesta: haz un agujero negro a modo de boca, dos pequeños para la nariz y unos ojos cerrados con líneas rectas. Aprovecha el relleno que sacaste y ponlos saliendo de la boca. Ya verás el efecto…
- Si no eres tan bueno pintando, puedes hacer moldes en cartón para marcarlos en la calabaza y ahí sí cortar con el cuchillo.