Largas colas y máquinas deficientes entre las trabas para votantes

No ha habido incidentes de violencia pese a que el presidente Donald Trump ha utilizado retórica incendiaria e información falsa para azuzar a su base

WASHINGTON— Millones de votantes acudieron este martes a las urnas para participar en unos comicios de mitad término marcados por alta participación electoral, pero muchos afrontaron largas colas, máquinas deficientes y problemas técnicos y, pese a la polarización del país, no ha habido incidentes de violencia.

La página “Electionland”, una  colaboración entre el sitio “Propublica” y varios medios de comunicación ha contabilizado más de 120 problemas en las urnas tan solo en la ciudad de Nueva York, casi todos relacionados con problemas tecnológicos.

El proyecto de “Electionland“detalló en un mapa los problemas más frecuentes y dónde se han producido. La larga espera, marcada con color verde fue el problema más frecuente, seguido por problemas con papeletas provisionales, y problemas con la lista de empadronamiento.

“Electionland” incluye un formulario en línea para que los votantes puedan denunciar todo tipo de problemas en las urnas.

También se han reportado problemas en Georgia, un estado sureño donde la demócrata Stacey Abrams quiere hacer historia como la primera gobernadora afroamericano en el sureño estado, si logra vencer al secretario de Estado estatal republicano, Brian Kemp. Cuatro de los 156 centros de votación en el Condado Gwinnett afrontaron problemas técnicos que agravaron la espera en las colas.

Algo similar ocurrió en Carolina del Sur, donde las autoridades tuvieron que intervenir para arreglar decenas de máquinas de votación que no contaban con energía eléctrica para el conteo de papeletas.

Aunque la lluvia en el área de la capital estadounidense y otras partes de la costa Este no parecieron deprimir la participación en las urnas, sí hubo caos y confusión debido a cambios repentinos en centros de votación.

Además, muchos votantes se habían confundido de recinto electoral, o habían recibido información errónea.

En Dodge City (Kansas), las autoridades electorales trasladaron hace unos meses el centro de votación fuera de la ciudad, creando problemas de logística para los aproximadamente 13,000 votantes inscritos, la mayoría de éstos hispanos.  Grupos cívicos elaboraron un plan de contingencia para trasladar a los votantes en autobuses al centro de votación.

Varios grupos cívicos, incluyendo grupos  hispanos como “Mi Familia Vota”, la Asociación Nacional de Funcionarios Latinos Elegidos (NALEO), establecieron líneas telefónicas para ofrecer información a los votantes, o para recabar quejas y problemas en las urnas.

El grupo “Lawyers Committee for Civil Rights Under Law”,  que puso en marcha una veintena de centros de llamada, dijo que sus voluntarios habían recibido alrededor de 25,000 llamadas para reportar problemas, especialmente de Georgia, Florida, Arizona y Texas.

En Arizona, observadores electorales también informaron de largas demoras debido a problemas técnicos con las impresoras de las papeletas de votación, lo que ha afectado principalmente a votantes latinos, afroamericanos y nativoamericanos, según el grupo “Common Cause”.

La cifra de quejas recibidas por ese grupo que representa más del doble del número de llamadas en 2014.

Debido a problemas técnicos que causaron demoras en la escuela primaria Annistown, en Snellville, un suburbio de Atlanta(Georgia), las autoridades extendieron el cierre del centro de votación. Al parecer, las máquinas de votación estaban operando solo con pilas antes de que las autoridades se percataran de que necesitaban cables para corriente eléctrica.

Otras escuelas en Georgia también cerrarán entre nueve y diez de la noche hora local, dos a tres horas después del cierre oficial, para permitir que las personas en cola puedan votar.

Las autoridades en Carolina del Norte también extendieron la hora de cierre debido a las demoras y problemas técnicos.

En Texas, más de 15 millones de votantes adicionales se empadronaron este año, en parte atraídos por la reñida contienda entre el demócrata Beto O´Rourke y el republicano Ted Cruz por el escaño en el Senado. Las colas se prolongaron durante horas y, al menos en el Condado Harris, que incluye a Houston, un juez ordenó que nueve centros de votación extendieran su cierre por una hora.

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS), encargado también de velar por la seguridad cibernética, dijo estar al tanto de los problemas con las máquinas de votación en varios estados pero que éstos no han tenido un impacto significativo en el proceso electoral. Tampoco hay indicios de problemas de “hackeo” en los comicios.

Más de 39 millones de personas han emitido su voto, buena parte de éstas por adelantado, según el “US Election Project”.

En esta nota

Congreso EEUU Elecciones 2018 Política
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain