Indocumentado mexicano se libra de la pena de muerte. Trump usó su caso contra los inmigrantes
Apolinar Altamirano está acusado de asesinar a tiros a un dependiente que le insistió para que pagara el paquete de cigarrillos que se iba a llevar. Tras matarlo, el mexicano agarraría más cajetillas de tabaco y provocaría una persecución policial al darse a la fuga
Uno de los ejemplos que ha situado el presidente Donald Trump en su retórica antiinmigrantes es el caso de Apolinar Altamirano, de 34 años. Este mexicano indocumentado está acusado de asesinar a tiros en 2015 a Grant Ronnebeck, un empleado de una tienda de conveniencia de Mesa, Phoenix.
El caso de Altamirano vuelve ahora a estar de actualidad ya que el fallo de un juez lo ha salvado de la pena de muerte. La discapacidad que padece el acusado fue la razón por la que ha pasado a enfrentar la cadena perpetua, en caso de que el próximo 1 de agosto sea declarado culpable de asesinar al empleado de 21 años.
La Oficina del Fiscal del condado de Miracopa, que procesa a Altamirano, está “revisando el análisis y el registro para evaluar los próximos pasos”. Esta declaración, que cita la agencia AP, no deja claro si apelarán la decisión.
Los hechos
Altamirano está acusado de asesinar a tiros a Ronnebeck cuando el empleado le insistió para que pagara el paquete de cigarrillos que iba a llevarse. Las autoridades aseguran, también según AP, que el acusado pasó por encima del joven para agarrar varios paquetes de cigarros antes de irse de la tienda.
El mexicano huyó del lugar manejando su vehículo a gran velocidad. Tras la persecución, la policía encontró en el auto una pistola y un paquete de tabaco sin abrir.
El hombre, que ya ha sido condenado a seis años de prisión tras declararse culpable de la posesión ilegal de armas, todavía se enfrenta a varios cargos en relación a la muerte de Ronnebeck. Sin embargo, Altamirano se ha declarado no culpable de robo y asesinato.
Michael Kemp, el mismo juez que falló impedir a los abogados solicitar la pena de muerte para el indocumentado, prohibió en octubre que los fiscales usaran el estatus migratorio de Altamirano en el caso. Según él, que Altamirano haya vivido en EEUU sin autorización durante más de 20 años no tiene ninguna relevancia.