¿Cómo podemos identificar el trastorno de estrés postraumático?
Existen sucesos que marcan la vida de las personas provocando trastornos y otras complicaciones a nivel psicológico
El estrés postraumático se produce luego de que alguien ha vivido o visto situaciones aterradoras que terminen afectando su vida, como lo indica la Clínica Mayo. Recuerdos, sueños y cambios en los hábitos son las secuelas que produce el estrés postraumático.
Síntomas
Los síntomas pueden aparecer después de un mes de los acontecimientos, o mucho tiempo después. No hay un lapso determinado para que esto suceda. Por eso hay que debes prestar atención a las señales que vayan apareciendo.
Los síntomas suelen agruparse en 4 tipos: los recuerdos intrusivos, la evasión, cambios en el estado de ánimo y reacciones físicas y emocionales ante situaciones parecidas a las ya vividas.
Los síntomas pueden aparecer en conjunto y varían a medida que pasa el tiempo.
Recuerdos intrusivos
Estos son recurrentes y hasta involuntarios. Pueden ser angustiantes, y en ocasiones se pueden revivir como si estuvieran ocurriendo. También se producen pesadillas recurrentes en torno al hecho vivido.
Esto produce angustia y hasta reacciones físicas, generando problemas de salud, como insomnio o pérdida del apetito. La persona incluso puede desarrollar episodios de paranoia.
Evasión
Las personas con estrés postraumático, para evitar revivir los episodios, intentan por todos los medios evitar cualquier cosa que los acerque al hecho que los afectó. Esto implica distanciamiento de lugares, actividades y personas que les traigan amargos recuerdos.
Como consecuencia, terminan alejándose de la sociedad, desarrollando otros problemas, como las fobias.
Cambios físicos, emocionales y conductuales
Las personas con estrés postraumático desarrollan una visión patética de la vida, pierden toda esperanza en el futuro y algunos desarrollan un tipo de comportamiento destructivo.
Les cuesta relacionarse con sus seres queridos y pierden todo interés por actividades cotidianas.
También tienen problemas para concentrarse y para dormir, y hasta llegan a desarrollar una conducta agresiva. Por eso es importante la ayuda psicológica para superar los traumas, recuperar el estilo de vida normal y lidiar con el estrés postraumático.