Tips para cocinar fácil alimentos al vapor en el microondas
Los alimentos conservan sus nutrientes y se cocinan ráídamente
El horno de microondas ha venido a ser un elemento de gran ayuda en la cocina no solo para calentar de manera rápida los alimentos, sino también para cocinar en plazos cortos e incluso preparar comidas sencillas y completas.
Uno de los métodos de cocción que podemos utilizar es “al vapor”, una manera súper práctica de preparar los vegetales. Conservan sus nutrientes, sabor y textura.
Si aún tienes algunas dudas sobre si es seguro y saludable cocinar en el microondas, no tienes de qué preocuparte, lo es. La Organización Mundial de la Salud, señala que los alimentos cocinados en un horno microondas son tan seguros y tienen el mismo valor nutritivo, como los alimentos cocinados en un horno convencional.
Una característica de cocinar en el microondas es que la energía del horno penetra profundamente dentro del alimento y se reduce el tiempo total de cocción.
Consejos
Debes usar un recipiente adecuado para uso en horno de microondas. Éstos no absorben calor y solo se calientan por estar en contacto con el alimento caliente.
Se puede usar vaporera (plástica) o un bowl con tapa.
Para evitar oxidación, pelar y cortar el alimento poco antes de prepararlo.
Lavarlos bajo el grifo y no dejarlos en remojo, para evitar que pierdan nutrientes.
Añade la sal al principio de la cocción, así las verduras perderán menos líquidos, vitaminas y minerales.
Tapa bien para que el vapor no se escape.
Programa máxima potencia y controla el tiempo, para que no se pasen de cocción.
Para verduras de cocción corta, como las judías verdes, los guisantes, zanahoria tierna cortada, floretes de brócoli o espárragos verdes, empezar con 2:30 minutos por 200 gramos. Comprobar cocción y agregar un minuto por ciclo.
Para calabaza, coliflor, col, apio, kale, nabo, empezar con 4 minutos, y seguir cociendo un minuto y medio más cada vez.
Para remolacha, patata, yuca, iniciar con seis minutos y seguir cocinando agregando minuto y medio.
Para comprobar la cocción, debemos remover para que el calor se reparta uniformemente.
No cocinarlas de más, una vez que están listas, sacarlas del recipiente y si no serán consumidas al momento debemos enfriar lo antes posible.
Se debe prestar atención al cocinar piezas gruesas, ya que la cocción podría ser desigual.
No se recomienda preparar grandes cantidades, ya que el proceso se hace más lento y el calor no se repartirá de forma adecuada.
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