Cómo afecta el confinamiento a la visión de los niños
Según los expertos en salud visual, la exposición a la luz solar es determinante para prevenir y retener la miopía en niños y adolescentes
La cuarentena no ha sido sencilla para nadie, mucho menos para tus hijos, pero aunque parece que todo en su vida está controlado, es necesario que sepas que esta disminución de luz natural podría tener repercusiones en su visión, entre otras afectaciones más.
Así es, durante estos meses que tú y tu familia han estado confinados debido al Covid-19, los niños han tenido una menor exposición al sol, generando una serie de situaciones en contra de su salud, esto porque la luz solar ayuda a diversos aspectos en su desarrollo.
Según los expertos en salud visual, la exposición a la luz solar es determinante para prevenir y retener la miopía en niños y adolescentes porque estimula la producción de dopamina, un neurotransmisor que bloquea el alargamiento del ojo durante su desarrollo. Obviamente, con la restricción de salir a la calle apenas una hora, la exposición a la luz natural es mucho menor.
Además de que la luz natural es esencial para el desarrollo ocular de los niños, pasar tiempo al aire libre reduce el riesgo de miopía. Uno de los informes más recientes pone de manifiesto que el riesgo de desarrollar miopía se reduce en aproximadamente un dos por ciento por cada hora adicional a la semana que un niño pasa al aire libre.
Al no poder disfrutar de actividades al aire libre y tener que permanecer más horas en casa, la vista descansa menos, aumenta la fatiga visual, la sensación de cansancio, picor o lagrimeo en los ojos, incluso ansiedad y angustia.
Y qué decir del uso de las pantallas y dispositivos electrónicos. Raimundo Fernández, profesor titular del departamento de óptica de la Universidad de Granada, afirma que en España se calcula que hasta un tercio de la población puede pasar una media de 9 horas al día expuesto a los dispositivos digitales. Este dato varía en función de la edad y de la profesión, y puede llegar a alcanzar las 3 horas en el caso de la población preescolar.
Debido al confinamiento, este promedio en el número de horas diarias puede verse incrementado, con gran incidencia en el ámbito escolar debido a la educación digitalizada a distancia. Además, hay que sumarle el tiempo dedicado a las video-llamadas, que ha sido la única manera posible de contacto social y “estrictamente necesaria” entre los menores.
Aunque parece este el menor de los problemas en la familia, es momento de que comiences a proteger la visión de tus hijos, adaptar los cuidados de su salud visual y permitir que sea una nueva realidad mucho más saludable.