Estados Unidos retomará las ejecuciones federales después de casi dos décadas
Cuatro presos condenados por asesinar a menores serán los primeros en recibir una inyección letal bajo la orden de la Administración Trump
El Gobierno federal reactivará sus ejecuciones a presos después de una pausa de 17 años, según anunció este lunes el Departamento de Justicia. Aplicarán una inyección mortal a cuatro presos condenados por asesinar a menores.
“Los cuatro asesinos cuyas ejecuciones están programadas hoy han recibido procedimientos completos y justos bajo nuestra Constitución y reglas”, dijo el fiscal general, William Barr. “Se debemos a las víctimas de estos horribles crímenes”, dijo Barr para justificar la decisión de la Administración Trump.
La primera ejecución -programada para el 13 de julio- será la de Daniel Lewis Lee, que asesinó a los tres miembros de una familia (incluida una niña de ocho años) y fue condenado a muerte en 1999. Dos días después será el turno de Wesley Ira Purkey, que violó y asesinó a una niña de 16 años. Dustin Lee Honken, que disparó y mató a cinco personas, será ejecutado el 17 de julio. El 28 de agosto, inyectarán a Keith Dwayne Nelson, que secuestró, violó y estranguló con un cable a una niña de 10 años.
Desde que se restableció la pena de muerte federal en 1988, solo tres se han ejecutado, según el Centro de información sobre la pena de muerte. Todas se llevaron a cabo durante la Administración de George W. Bush. Uno de ellos fue Timothy McVeigh, condenado a muerte por bombardear el edificio federal de Oklahoma City.
Después de una serie de desafíos legales que retrasaron las ejecuciones, un tribunal federal de apelaciones dio en abril el visto bueno para retomarlas. Ahora hay más de 60 presos federales condenados a pena de muerte. Entre ellos están Dylann Roof, que mató en 2015 a nueve feligreses en una iglesia de Charleston, en Carolina del Sur, y Dzhokhar Tsarnaev, que participó en el atentado del maratón de Boston 2013.