¿Cómo incide el verano en el deseo sexual?
El verano es una época en que la sexualidad está a flor de piel
El flujo de las estaciones influye sobre el cuerpo humano, y uno de los aspectos en que es posible rastrear dicha influencia es la sexualidad. A continuación detallamos un poco la relación existente entre el deseo sexual y el verano.
El influjo del verano sobre el deseo sexual
Según un artículo del portal Cuídate Plus, un equipo del Instituto Psicología-Sexología de Mallorca indicó que el verano es susceptible a propiciar encuentros sexuales a razón de un cambio hormonal.
En concreto, las altas temperaturas del verano estimulan una mayor producción de oxitocina y endorfinas, dos hormonas relacionadas con el deseo sexual. Cuando dichas hormonas incrementan, lo hace también nuestro deseo por el sexo.
El equipo señala, no obstante, que el deseo sexual está influido también por otros factores, y que él varía a lo largo de nuestra vida, por lo que el factor climatológico no es una causa directa de su variación.
Posibles factores del aumento del deseo sexual
Es posible explicar el incremento del deseo sexual en verano por algunos elementos como, por ejemplo, la mayor cantidad de horas de luz. Algunos estudios han indicado que la producción de estrógenos y testosterona, que son hormonas sexuales, incrementa con la exposición a la luz solar.
También hay que señalar que vestimos menos ropa en verano que en otra época del año, un rasgo que puede hacernos sentir más atractivos, así como que nos estimula a observar a los otros con mayor detenimiento.
Las fantasías sexuales relacionadas al verano también juegan un rol importante, dado que estimulan nuestra sexualidad e incrementan el deseo. Una fantasía recurrente consiste en tener sexo en la playa.
El flujo de las estaciones solamente es una de las variables que influyen sobre el deseo sexual, por lo que los cambios que percibas en el disfrute del sexo no dependen solamente de la estación actual, sino también de otros factores.