Gloria Guillén “habla” con su hija Vanessa frente a la Virgen de Guadalupe: “Ya eres historia”, “eres especial”
"Se me apareció en mis sueños con la Virgen, todo el tiempo con la Virgen", narra la afligida madre de la soldado
Gloria Guillén está segura que su hija la escucha.
Armada con su rosario -el que sostiene como tesoro- y frente al mural en su honor cerca de la base militar de Fort Hood, en Texas, donde Vanessa fue asesinada, la madre le habla.
“Ya eres historia”, “eres especial”, se le escucha repetir una y otra vez con la confianza de que su “niña” está presente.
Gloria además clama a la Virgen de Guadalupe, que en la imagen se le ve cobijando doblemente a la soldado.
La plegaria del Ave María matiza la conexión que solo una madre abnegada es capaz de establecer sin la presencia física de un hijo.
“Se me apareció en mis sueños con la Virgen, todo el tiempo con la Virgen. Mi hija es un ángel tan precioso que si la hubiesen conocido en persona; una vocecita tan tierna que cuando llegaba de jugar fútbol me decía, ‘ya te sobo los pies’, y me sobaba los pies”, relata Gloria.
Gloria, que en redes la apodan “Mamá Guillén” por su temple y entrega para honrar la memoria de su hija y reclamar justicia, insistió este viernes en que no cesará y que seguirá peleando hasta encontrar a “los verdaderos responsables de la orden de la muerte de mi hija” a días de que se cumplan tres meses del crimen.
“Por eso Dios me dijo levántate otra vez. Yo caí muy mal, ¡levántate!. Ahora me dan ataques de pánico, ansiedad, mucho dolor, porque yo vine a enterarme cinco días después de la muerte de mi hija porque yo caí en cama…”, manifestó.
En la conferencia en el exterior de Fort Hood luego de una ceremonia militar de despedida en el recinto, la madre se expresó insatisfecha con las explicaciones de las autoridades de la base sobre los responsables del asesinato.
“Ahora queda saber quién fue. Quién de esa base dio la orden de desaparecer a mi hija. Ese hombre que la asesinó ya está donde tiene que estar. Ese fue un títere de esas personas”, planteó.
Gloria se refirió a Aaron David Anderson, el Especialista sospechoso de atacar a martillazos a Vanessa en el salón de armas del espacio el pasado 22 de abril, según la versión que manejan las autoridades.
Robinson se suicidió el 1 de julio cuando era intervenido por agentes en relación con el caso mientras caminaba por la avenida East Rancier, no muy lejos del fuerte en Killeen.
Para Cecily Aguilar, novia de Robinson y quien habría colaborado para disponer del cuerpo de Vanessa, no exige la pena de muerte, sino que pase el resto de sus días en la cárcel.
“Para esa señora que está presa yo pido que le caiga todo el peso de la ley, y que se quede allí de por vida, que no salga. Porque yo soy una mujer de fe y de Dios. No pido la muerte para ella porque no tengo por qué pedirla”, argumentó la mexicana.
Ceremonia en la base
En un comunicado en su sitio de prensa, las autoridades de Fort Hood indicaron este viernes que el recinto atraviesa un momento dífícil.
“Esto es difícil de discutir porque la tragedia por su muerte ha cambiado para siempre el escuadrón y ha cambiado para siempre a su familia. Nosotros batallamos con sentimientos de coraje, depresión, ansiedad, miedo, frustración y tristeza. Y tenemos muchas preguntas, algunas de las que nunca serán contestadas”, dijo Edward Gavin, comandante del Regimiento del Escuadrón de Ingenieros del Tercer Regimiento de Caballería al que pertenecía Vanessa.
La ceremonia de recordación a la que asistieron otros miembros de la unidad a la que estaba adscrita Vanessa, así como la familia de la fallecida incluyó un altar en el que se colocaron sus botas militares, entre otras herramientas de combate.