Conoce los usos mágicos del maíz y su significado espiritual

Una infinidad de platillos con maíz son los que se cocinan en todos los pueblos latinoamericanos, ya que este alimento es básico en nuestra alimentación. Tortillas, tamales, arepas, sopas, mazamorras y panes, entre muchos otros deliciosos antojos son los que se preparan en los hogares.

Pero más allá de su rico sabor y variedad culinaria posee un significado mágico muy interesante. En las culturas americanas es símbolo de abundancia y fertilidad, incluso, los mayas creían que los dioses habían creado al ser humano a partir de la masa del maíz.

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Los indígenas de América se han alimentado durante siglos con el maíz por lo que tiene un significado importante para todas las culturas del continente. Por ejemplo, sus granos son considerados de buena suerte y símbolo de abundancia; algunas culturas dedicaban ritos en honor a maíz para asegurar una buena cosecha durante el año.

Es por eso que en la actualidad este vegetal es usado en una gran cantidad de ritos y amuletos para asegurar la prosperidad y buena fortuna. Hay quienes creen que colocar granos en una bolsita color naranja y cargarlo siempre nos ayuda a tener suerte y abundancia.

Según los santeros, la mazorca tostada y adornada con una cinta roja aleja enfermedades y desdichas; si se desea tener contento a San Lázaro hay que colocar una detrás de la puerta principal de la casa.

Otra tradición indica que colocar una espiga de maíz en la cuna de los bebés los protegerá de cualquier fuerza negativa. Un racimo de mazorcas colocados en un espejo traerá buena suerte en el hogar.

Ritual con maíz para abrir caminos

Uno de los poderes más conocidos del maíz es para abrir caminos. Existe un ritual muy efectivo para no encontrar bloqueos espirituales ni obstáculos en nuestros objetivos.

Los ingredientes a usar son: 7 granos de maíz, 7 rosetas de maíz, palomitas o pochoclos, 7 velas blancas, 7 monedas pequeñas vigentes, 7 caramelos pequeños, 7 papelitos de glasé rojos, 7 cintas o hilos rojos, 7 pedacitos de dulce de calabaza o zapallo, 7 pedacitos de sándalo y 7 granos de arroz.

Junta todos los papelitos de glasé rojos para formar 7 costalitos. En el primero coloca los 7 granos de maíz; en el segundo las rosetas de maíz, en el tercero las monedas y así sucesivamente hasta lograr 7 paquetitos con todos los ingredientes; cada costalito debe amarrarse con cinta roja y una vez que termines, reúne todos y rodéalos con las 7 velas blancas, préndelas y pide que te abra todos los caminos.

Al día siguiente camina siete cuadras en línea recta y deja en cada esquina un costalito y regresas por el mismo camino. Al volver a casa agradece al universo su protección.

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