El Arco de La Villita, símbolo de la comunidad mexicana en Chicago, es designado monumento histórico

Además de convertirse en el primer ícono de la comunidad latina en recibir esta distinción en esta ciudad también es la primera vez en la que un arquitecto mexicano recibe ese importante reconocimiento

El Arco de La Villita ya es un monumento histórico de Chicago. (Belhú Sanabria / La Raza)

El Arco de La Villita ya es un monumento histórico de Chicago. (Belhú Sanabria / La Raza) Crédito: Impremedia

La comunidad mexicana aplaude la designación de monumento histórico al Arco de La Villita de la calle 26. Es una noticia que llega en el momento justo, dicen sus residentes y emprendedores de ese vecindario del suroeste de Chicago.

Además de convertirse en el primer ícono de la comunidad latina en recibir esta distinción en esta ciudad, también es la primera vez en la que un arquitecto mexicano recibe ese importante reconocimiento

Con la designación de monumento histórico, el Arco de La Villita está protegido de cualquier alteración o demolición significativa de su estructura.    

El pleno del Concilio Municipal de Chicago votó el miércoles 26 de enero para otorgar el estatus de hito a un arco que sirve como entrada a la comunidad mexicoamericana más grande del Medio Oeste.         

La votación a favor fue unánime.

El arco de estuco de dos pisos que da la bienvenida a los visitantes y residentes del vecindario de La Villita de Chicago es la primera designación histórica oficial para una estructura diseñada por Adrián Lozano, un arquitecto de origen mexicano.

‘Bienvenidos a Little Village’ reza un rótulo de metal en el centro del arco de dos pisos. En cada lado tiene una torre con cúpula y en medio y en la parte superior lleva un reloj de bronce mecánico. La estructura se extiende por la calle 26 al este de la avenida Kedzie en el barrio de La Villita, es la puerta de entrada al corredor comercial del vecindario y ha sido el punto de encuentro donde la gente de la comunidad mexicana se reúne para desfiles, manifestaciones por la paz, protestas y hasta vigilias.

El arco de La Villita fue construido en 1990 y diseñado por el arquitecto mexicano Adrián Lozano. El entonces presidente mexicano Carlos Salinas de Gortari donó el reloj que se instaló en el arco, según registros de la ciudad.

El concejal del Distrito 12 George Cárdenas, cuya jurisdicción cubre el área donde se encuentra el arco, dijo en una entrevista pasada a La Raza que “el arco fue hecho por un arquitecto mexicano que ya no vive, es una estructura muy definida, arquitectura de estilo mexicano”.

Se estima que 77% de la población de La Villita es de ascendencia mexicana, según la ciudad.

Ivette Treviño, directora ejecutiva de la Cámara de Comercio de La Villita, dijo que la noticia sobre la designación del Arco de La Villita como monumento histórico fue muy bien recibida y que ya están trabajando con el concejal George Cárdenas para tener un presupuesto para este año para poder hacer las reparaciones que se necesitan.  

“Queremos desde arreglar las luces, el reloj que tiene el arco, los materiales, tienen que ser varios cambios y reparaciones para el arco y lo bueno es que ahora vamos a estar trabajando junto con la Ciudad para tener los fondos para poder hacer esos arreglos que necesita el arco”, dijo Treviño a La Raza.

Algunos residentes de la comunidad dicen que la noticia del nombramiento del arco es algo positivo y que motiva a la comunidad, recientemente impactada con la muerte a tiros de la niña Melissa Ortega, de 8 años.

Roma Díaz, residente de La Villita, dice que el arco hace mucha referencia a los pueblos de México: “en los estados se acostumbra mucho hacer una construcción así, que se usa para dar la bienvenida a la entrada de los estados, de las ciudades, o de los pueblos… A todos nos remite a nuestro México, a nuestro paseo de la provincia de nuestro país cuando vamos a otros estados, a otras comunidades”.

“Esperemos que esta designación sirva de motivación y reflexión que no puede ser nada más lo negativo de la parte de la cultura mexicana, de las cosas difíciles que se viven en el barrio de La Villita en cuanto a la violencia sino también entender que el mexicano tiene una presencia aquí en Chicago como comunidad”, dijo Díaz.

“Estamos trabajando muy cercanos con el Departamento de Policía de Chicago para ver si tenemos varias reuniones con los negociantes para estar al tanto y hablar sobre el crimen, robos que hay aquí en La Villita, queremos hacer cambios, queremos trabajar juntos y también con nuestros políticos para asegurarnos que podemos seguir manteniendo negocios aquí en La Villita. Entonces llegó esta noticia justo a tiempo”, comentó Treviño.

‘Nos recuerda nuestra tierra natal’

“El Arco de La Villita representa las contribuciones culturales y sociales de la comunidad mexicana en Chicago. Me siento muy emocionado y orgulloso de que ahora sea un monumento histórico. Nos recuerda nuestra tierra natal, nuestras tradiciones y nuestras raíces. Es una estructura que dice claramente que los méxicoamericanos somos parte de esta comunidad y esta ciudad”, indicó el congresista Jesús ‘Chuy’ García en una declaración dirigida a La Raza. 

‘Chuy’ García era el concejal del Distrito 22 cuando se decidió construir el Arco de La Villita. “Cuando decidimos construir el arco nos estábamos arriesgando, porque no sabíamos si una estructura de esa naturaleza iba a ser aceptada por la comunidad. No estábamos seguros si el arco llegaría a ser visto como algo que representara a la gente de la comunidad y que los enorgulleciera”.

“Ahora, cuando paso junto a él, me inspira a seguir luchando por el reconocimiento y la representación que se le negó a nuestra comunidad durante décadas, y me enorgullece haber desempeñado un papel en traerlo a nuestra comunidad”, indicó ‘Chuy’ García.

El concejal del Distrito 22 Michael Rodríguez dijo que el nombramiento del Arco de La Villita como monumento histórico es un reconocimiento muy importante para la comunidad latina. “La estructura es símbolo de nuestra comunidad y lo bueno es que es la primera vez que hay un arquitecto que también lo están reconociendo, el señor Adrián Lozano”.

 “La comunidad es muy fuerte, resiliente y también muy trabajadora. Esto es algo que nos refleja. La designación del Arco de La Villita es un reconocimiento muy merecido”, dijo Rodríguez. 

La ciudad ahora tendrá que establecer fondos para poder renovar y hacer las mejoras al arco.

Como el arco pertenece a la jurisdicción del concejal del Distrito 12 George Cárdenas, él es quien va a manejar el presupuesto que otorgue la ciudad.  

La Raza contactó a Cárdenas pero hasta el cierre de edición de la nota no obtuvimos respuesta.

Sin embargo, en una entrevista pasada con La Raza y antes de que el arco fuera designado monumento histórico, Cárdenas dijo: “Para preservar los lugares históricos como hitos se pueden obtener subvenciones, se pueden pedir directamente al municipio de Chicago, al estado también… Ya siendo consagrado se puede pedir el fondo y se puede establecer un presupuesto anual para poder mantenerlo dignamente”.

La cobertura editorial de La Raza es posible en parte gracias al apoyo del Chicago Community Trust.

En esta nota

La Villita
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain