Tres mujeres inmigrantes crean la primera cooperativa de limpieza “Mujeres Brillantes” en el sureste de Chicago
Esta iniciativa busca ayudar a la comunidad inmigrante en el campo laboral, promueve el empoderamiento de los trabajadores y los impulsa a que se conviertan en propietarios
Ya no dependerán de un patrón abusivo o correrán el peligro de que se les robe el salario, porque ahora tres mujeres inmigrantes latinas se han convertido en socias y han lanzado la primera cooperativa de trabajadores de limpieza en el sureste de la ciudad.
La cooperativa de Limpieza llamada Mujeres Brillantes es un negocio iniciado por Estela Nava, Esmeralda Gutiérrez y Mairim Fernández, quienes recibieron ayuda desde cero por parte del Centro de Trabajadores Unidos de Chicago para hacer realidad su sueño de tener un negocio propio.
Las tres emprendedoras, que también recibieron ayuda de la ciudad de Chicago para su emprendimiento, anunciaron en días recientes en el Ayuntamiento el lanzamiento de Mujeres Brillantes Cleaning Co-op. En el anuncio estuvieron presentes organizadores comunitarios locales, la concejala del Distrito 10 Susan Sadlowski-Garza y la comisionada del Condado de Cook Alma Anaya, entre otros.
“Estos son trabajadores, que siempre han estado en un segundo plano, trabajadores que han sido explotados, trabajadores que han sido parte [víctimas] del robo de salarios”, dijo Sadlowski-Garza.
Anaya señaló durante el lanzamiento de la cooperativa que se estaba haciendo una celebración de empoderamiento de los trabajadores. “Tenemos que invertir un poco más en las cooperativas para tener la ayuda técnica para las personas que quieren ser dueños de una cooperativa. Lo bueno de esto, y por la razón que estamos celebrando, es que son mujeres las que están ejerciendo este liderazgo, son mujeres y personas de color que en muchas ocasiones se les ha abusado en su lugar de trabajo y no han recibido respeto”, dijo Anaya.
Según Maricela Estrada, supervisora y organizadora de cooperativas del Centro de Trabajadores Unidos (CTU), la idea de las cooperativas comenzó en 2014. El fin era conocer de qué manera este modelo de negocio podía ayudar a la comunidad por lo que miembros de CTU hicieron varios viajes tanto a México, donde las cooperativas son un movimiento muy grande, como a varias partes de Estados Unidos donde ya se ha comenzado con más fuerza en los últimos años este concepto de cooperativas, explicó.
“Empezamos a promover esto en nuestra comunidad y la comunidad lo ha aceptado muy bien, porque es una alternativa a los trabajos que existen, especialmente para la gente indocumentada inmigrante. Hay mucha explotación ahora en los trabajos, en las compañías, y de ahí surgió la idea porque la cooperativa es un modelo de negocio donde se promueve la propiedad en la que los trabajadores no solamente sean los trabajadores de la compañía sino también los propietarios”, destacó Estrada.
CTU ha apoyado desde sus inicios a la cooperativa de comida Visionarias, que comenzó en 2015, y a esta última Mujeres Brillantes, que es una cooperativa de trabajadores de limpieza que se formó a principios del 2020, antes de la pandemia de covid-19, y su lanzamiento ocurrió en agosto de 2022.
Karina De La Cruz, administradora de cooperativas en CTU, dijo que se tiene planeado crear más cooperativas en el futuro. “El proyecto en grande es que queremos hacer más cooperativas porque realmente la gente necesita ayuda, no solamente para lo que es comida o limpieza”.
Esto significa que además de las cooperativas de comida, como Visionarias, y Mujeres Brillantes, cuyo rubro es ofrecer servicio de limpieza, hay planes para más.
“Hay algunas ideas, tenemos pensado alguna cooperativa a lo mejor de postres, porque a la gente le gusta los postres, hacer una cooperativa de mecánica, otra cooperativa de tejido, hay un grupo de señoras que le gusta eso”, menciona De La Cruz.
Pero antes de crear una cooperativa hay que informarse y capacitarse para saber cómo es que funcionan y cuáles son las responsabilidades de los copropietarios de las cooperativas, según los organizadores de CTU.
‘Tenemos ambición a salir adelante’
Estela Nava, copropietaria de Mujeres Brillantes, tiene 40 años de experiencia haciendo trabajo de limpieza. Recuerda que cuando llegó de México trabajó de mesera, cocinera y haciendo limpieza en un hotel conocido de Chicago, llegando a ocupar el cargo de supervisora. “Trabajando en una compañía así te das cuenta de que a veces hay mucha explotación, entonces es cuando empiezas a pensar ’quiero mi propio negocio’. Yo abrí mi salón de belleza, ahorita con la pandemia se bajo mucho, entonces dije ‘bueno. le puedo tirar a algo más y voy a tratar de hacer el estudio de cooperativas para lo de limpieza porque para lo de limpieza hay mucho’…”.
Nava cuenta que han sido tres años de batalla para hacer realidad su cooperativa. “Estoy muy orgullosa y muy contenta, mi corazón no cabe, porque gracias a la organización pudimos lograrlo y gracias a que cada una de nosotras tiene ambición de salir adelante y de no seguir siendo explotadas”.
‘Ese alguien cobraba por mí’
Esmeralda Gutiérrez se dedica al rubro de la limpieza desde hace 15 años. Ella ha trabajado por su cuenta y para otra persona. “Trabajo por mí misma y para alguien, pero ese alguien cobraba por mí y se llevaba una parte. Es mejor hacer una cooperativa de mujeres para recibir nuestra propia ganancia y el beneficio sea para nosotras mismas”.
Gutiérrez no sabía nada sobre cooperativas, pero aprendió sobre cómo funcionan en CTU y ahora es copropietaria de dicha Mujeres Brillantes.
Negocios cooperativistas
Mairim Fernández ha trabajado limpiando casas, en una cancha deportiva y repartiendo comida a domicilio. Tiene un carrito de venta ambulante en el que ofrece antojitos mexicanos en el sur de Chicago. “Si no hay trabajo de limpieza de casas, pues vendemos comida”, dice.
La venezolana Mairim es integrante de la Asociación de Vendedores Ambulantes de Chicago, donde funciona la Cocina Compartida de Trabajadores Cooperativistas. “Pertenezco a la Cooperativa de Cocina Compartida y a la Asociación de Vendedores Ambulantes por la misma cuestión de que tengo un carrito de venta de comida. He estado involucrada en educarme un poquito más sobre las cooperativas con la cocina, para como quien dice, ir aportando también a este mi otro negocio”.
A Fernández, inmigrante indocumentada, siempre le ha gustado tener diferentes fuentes de ingreso. En su país de origen además de haber sido asistente de gerente de aduanas contaba con varios pequeños negocios, ahora en Chicago está enfocada en sus emprendimientos de comida y limpieza.
Los talleres informativos y los entrenamientos sobre la cooperativa de limpieza empezaron un poco antes de la pandemia de covid-19, señala Fernández. “CTU proporcionó información a todos los inmigrantes que estaban sin empleo y con ganas de hacer un negocio propio y entonces comenzamos los entrenamientos un poquito antes de la pandemia”.
Tanto Fernández como sus otras dos socias tienen experiencia en ofrecer servicios de limpieza en casas, oficinas y hasta en hoteles. “Todas hemos trabajado en limpieza, lo que necesitábamos era ya concretar el negocio”, remarcó. Ahora la cooperativa Mujeres Brillantes Cleaning Co-op ya es una realidad.
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