La madre de Jada Pinkett Smith le animó a divorciarse de Will Smith
Vaya 'suegrita'
La actriz Jada Pinkett Smith ha vuelto a echar mano de su ya popular programa de entrevistas y confidencias emitido en Facebook, ‘Red Table Talk’, para ahondar en los entresijos de su longevo -y en ocasiones conflictivo- matrimonio con el también actor Will Smith, quien también ha aparecido en algún que otro capítulo del espacio para complementar las sorprendentes revelaciones de su esposa y, de paso, escenificar la etapa de unidad y armonía que viven ahora los dos enamorados.
Y teniendo en cuenta que nunca le ha temblado el pulso a la hora de expresarse sobre las horas más bajas de ese estrecho vínculo que se remonta a hace más de 20 años, resulta comprensible que Jada haya querido abordar ahora las reacciones que protagonizaron sus familiares más cercanos ante una de las crisis más fuertes experimentadas por la pareja, una que podría haber acabado en divorcio si la artista hubiera seguido las recomendaciones de su propia madre, Adrienne Banfield-Jones.
“Me lo dijo con total naturalidad: ‘Vale, ¿por qué no os divorciáis?’. Y yo le contesté que la separación nunca podía ser una opción. Es que hemos creado una comunidad muy bella, hemos creado una familia maravillosa… Y en el fondo nos llevamos muy bien. La idea de romper todo eso que habíamos forjado entre los dos me parecía egoísta y nunca lo hubiera aceptado”, ha explicado la intérprete sobre su proyecto de vida con el astro de Hollywood, con quien tiene a los no menos afamados Jaden (20) y Willow Smith (18).
Para Jada Pinkett Smith, su matrimonio con el protagonista de títulos como ‘Independence Day’ o ‘Ali’ va más allá de la conexión puramente sentimental que existe entre ellos y de él depende en buena parte la estabilidad y el bienestar emocional de todos sus miembros -incluido su hijastro Trey (26), a quien Will tuvo con su exmujer Sheree Zampino, quien también pasó en una ocasión por ‘Red Table Talk’. Por eso la intérprete se congratula de que la pareja, a base de anteponer el interés de sus retoños al suyo propio o de buscar el ansiado equilibrio entre lo profesional y lo personal, haya podido superar eventualmente todas las desavenencias que han marcado sus más de dos décadas de vida en común.
“Jamás diré que ha sido fácil, pero una de las cosas que nos hacen especiales a Will y a mí es que siempre somos capaces de encontrar ese punto de equilibrio entre las necesidades de nuestra familia y las que tenemos nosotros mismos como artistas”, ha sentenciado en el último capítulo de su programa.