Empresarios dicen que Peña los quería culpar de errores de su gobierno
La Confederación Patronal de la República Mexicana se negó a firmar acuerdo propuesto por el gobierno federal para paliar alzas por gasolinazo
México – Tras negarse a firmar el acuerdo propuesto por el presidente Enrique Peña Nieto, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) afirmó con ese pacto el mandatario quería culpar a los empresarios de los errores cometidos por el gobierno federal.
“La propuesta inicial del acuerdo era un error, porque responsabilizaba a los empresarios de los incrementos de precios y los culpaba de las propias equivocaciones de la administración federal”, destacó en rueda de prensa Gustavo de Hoyos Walther, presidente de la Coparmex, una de las principales organizaciones empresariales,
Destacó que el Acuerdo para el Fortalecimiento Económico y la Protección de la Economía Familia, firmado el lunes por el mandatario mexicano tiene tintes polarizantes, porque ponía al sector sindical y a organizaciones campesinas a estar al pendiente de los precios al consumidor.
Ante ello, la Coparmex presentó una propuesta con medidas “concretas” como respuesta al acuerdo para la economía familiar anunciado el lunes por el Gobierno y que incluye medidas como eliminar programas sociales duplicados o reducir los precios de la gasolina.
La patronal se negó a firmar el acuerdo gubernamental, nacido para responder a la incertidumbre de las familias mexicanas tras la subida del precio del combustible, por considerar que se hizo “apresuradamente” y que sus efectos son “limitados”.
Por ello, la Coparmex publicó un documento alternativo con propuestas basadas en “ideas específicas con impacto real en la economía”, particularmente la familiar.
La propuesta se estructura en tres líneas de acción. La primera de ellas se basa en “impulsar la economía familiar y la creación de empleo digno”.
Este punto incluye medidas como realizar un padrón único de beneficiarios de programas sociales y eliminar “por lo menos” la mitad de los 37 que han sido identificados por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) como duplicados.
También generar un nuevo esquema de bonos de productividad sin cargas fiscales y de seguridad social, así como un plan para asegurar condiciones de competencia en gasolinas, “a fin de que los precios sean lo más competitivos posibles”.
El segundo pilar busca “mejorar las finanzas públicas y promover estabilidad macroeconómica”.
La Coparmex propone emplear recursos provenientes del Impuesto Especial sobre Productos y Servicios (IEPS) -que en 2016 recaudó 67.000 millones de pesos (3.093 millones de dólares) más de lo presupuestado- y de la venta de petróleo para reducir los precios del combustible.
Asimismo, “establecer una partida presupuestal específica de inversión pública para crear refinación doméstica y ductos que reduzcan el costo de la transportación de gasolina”, dado que actualmente México importa el 60 % del combustible.
El tercer apartado, que tiene el fin de “promover el Estado de Derecho y el combate real a la corrupción”, recoge medidas como trabajar para reducir el robo de las gasolinas y bajar los homicidios dolosos.
A México le urge contar con una “agenda de agendas que coloque la ruta en la dirección correcta frente a los importantes retos que tenemos como país y de competitividad internacional”, aseguró la Coparmex.
El secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Ángel Gurría, defendió hoy la subida de los precios de las gasolinas en México, al considerar que era una actualización “inevitable e inaplazable”.
México era la única nación de las 35 que configuran la OCDE que seguía de un modo u otro subsidiando los combustibles fósiles, indicó.
Ello, aseguró, era “insostenible” desde el punto de vista del presupuesto, “injusto” desde el punto de vista social e “incongruente” con el propósito de reducir emisiones para combatir el cambio climático.
Con información de EFE