Bella después de vencer el cáncer de seno
Opciones que se tienen en los procedimientos para la reconstrucción de mamas
“Me siento bella y muy mujer”. Con estas sencillas palabras describe Roxana Lissa la felicidad que siente de ser una sobreviviente del cáncer mamario y el haber nacido en una era donde los avances médicos y tecnológicos permiten la reconstrucción de los senos después atacar esta terrible enfermedad.
“Es algo fabuloso para toda mujer que ha encarado el cáncer de senos contar con las diversas cirugías y tratamientos para la reconstrucción de los senos que existen hoy en día”, recalca la fundadora y presidente de RL Public Relation.
Y es que como explica el cirujano plástico Gil Kryger, del Kryger Institute of Plastic Surgery de Thousand Oak (California), la ley federal Derechos de la Mujer para su Salud y el Cáncer (Women’s Health and Cancer Rights Act, WHCRA) de 1998 impone que los planes de atención médica de grupos y las compañías de seguros médicos que ofrecen cobertura para la mastectomía paguen también por la cirugía reconstructiva después de ésta.
“Desde que tenga un seguro médico, la paciente tiene derecho [de por vida] a todo tipo de corrección de la cirugía de reconstrucción”, detalla el galeno. “Y, en el caso de que solo un seno estuvo afectado [por el cáncer], puede ser candidata para un procedimiento en el otro seno con el fin de que se vea igual al reconstruido”.
Estos procedimientos de simetría incluyen aumento, reducción o levantamiento de la mama. “Todos los procedimientos de reconstrucción, así como de simetría, están cubiertos por el seguro según lo dispuesto por la ley federal”, corrobora el Dr. Kryger.
Igualmente, por la ley federal, los seguros cubren las prótesis de seno y los tratamientos para tratar complicaciones que resulten de la mastectomía. De acuerdo con el tipo de cáncer mamario, los tratamientos comprenden cirugías que se centran en dos tipos de procedimientos: lumpectomía y mastectomía.
“La lumpectomía consiste en la extirpación de un tumor y parte del tejido normal que lo rodea. Es una mastectomía parcial, dado que se extirpa solo parte de la mama”, explica el Dr. Kryger. “Mientras que en la mastectomía se realiza una remoción total del tejido mamario [en el que se conserva o no, según el caso, la aureola o pezón]”.
Nuevas técnicas de reconstrucción
En ambos casos, si el tipo de cáncer lo permite, hoy se cuenta con variados tratamientos de reconstrucción de senos.
1. Transferencia de grasa
“Esta novedosa técnica se usa hoy para realizar las reconstrucciones que se efectúan después de una lumpectomía”, explica el cirujano plástico. “En este caso, se remueve la grasa que le sobra a la paciente en cualquier parte del cuerpo y se inyecta [con un procedimiento especializado] en la zona donde el tejido mamario se removió”.
Este método, que le da al seno una apariencia muy natural, está muy popular hoy para hacer las cirugías cosméticas de agrandamiento de senos.
2. Transferencia de tejido de la parte del abdomen
Este tipo de reconstrucción se efectúa cuando se ha hecho una mastectomía total y consiste en tomar tejido procedente de la parte bajo del abdomen (removiendo solo piel, vasos sanguíneos y grasa) que se implanta de inmediato en la zona donde se removió el seno.
“Esta es una técnica revolucionaria, ya que hoy no se necesita remover parte del tejido muscular como se hacía en el pasado. Este procedimiento está dando unos resultados fabulosos tanto en apariencia como en sensibilidad”, explica el Dr. Kryger.
3. Transferencia de tejido del costado o cualquier otra parte del cuerpo
Conocida en inglés como Deep Inferior Epigastric Perforator (o DIEP flap) “se remueve una porción de piel del costado o cualquier otra parte del cuerpo y se transfiere a la zona de los senos”.
4. Técnicas de implantes y expansores
Otros métodos populares que se efectúan de acuerdo con el tipo de cáncer mamario son los de colocar implantes para remplazar el tejido mamario que se removió y el de utilizar unos expansores que luego se remueven (cuando se obtiene la expansión de la piel deseada) y se reemplazan por implantes.
Otra buena noticia
La detección temprana sigue siendo la mejor medida de prevención, siendo las rutinarias mamografías y la autoexamionación las mejores fuentes para ello. Por eso, a las mujeres siempre se les ha animado a autoexaminar sus senos a diario en la ducha desde que se da su primera menstruación y a partir de los 40 años a cumplir con la mamografía anual cubierta por los seguros médicos.
Sin embargo, las mujeres menores de 40 años con alto riesgo de padecer cáncer mamario hasta hace poco tenían dificultad de tener acceso al servicio de mamografías pagadas por las pólizas de seguros. Pero esto se acabó. Por ejemplo, en California, gracias a la nueva ley AB 1795, firmada por el gobernador Edmund Gerald “Jerry” Brown Jr., hoy cualquier mujer con alto riesgo, independientemente de su edad, recibe este servicio sintomáticamente y quienes encaran recurrencias del mismo cáncer mamario tienen derecho a recibir tratamientos.
La nueva ley, combinada con los avances en los tratamientos, ha dado a las féminas la oportunidad de vivir más tiempo, especialmente a aquellas diagnosticadas con el cáncer mamario metastásico —conocido también como estado IV o avanzado, que salta del seno a otros órganos del cuerpo (generalmente a los huesos, pulmones, hígado o cerebro)—. Estas mujeres gozan hoy de un pronóstico de esperanza de vida de 10 años más y, ante ello, están optando a mandarse a hacer las cirugías reconstructivas que los cirujanos plásticos están siendo alentados a practicarlas.