DeVos no está preparada
El Senado debería rechazar su designación
Betsy DeVos no tiene los conocimientos para liderar el Departamento de Educación. La audiencia legislativa de confirmación, ayer, reveló su poca preparación que tiene para hacerse responsable de la educación pública.
DeVos fue seleccionada por ser una importante donante republicana dedicada a la reforma escolar. Su prioridad declarada de dar voz y opciones educativas a los padres es respetable. Ellos tienen una frustración muy comprensible ante las dificultades que enfrentan sus hijos para su prepararse adecuadamente para el futuro.
El sistema escolar es desigual, perjudicando a los hogares de menores recursos. El camino es fortalecer la educación pública, en vez de destruirla quitándole dinero, como ocurriría con las ideas de DeVos.
La nominada propone que del dinero que va a la educación pública se entreguen cupones para que los padres puedan enviar sus hijos a escuelas religiosas y privadas. Esta es una idea atractiva para muchos, pero cuestionable por su impacto. La opción escolar ya existe en las escuelas charter bien reguladas.
Pero los problema con De Vos apenas empiezan. Ella estará a cargo de garantizar los derechos civiles en la educación sin conocer la Ley de Individuos con Discapacidades. Dijo que era “prematuro” decir si continuaba con política de reportar las agresiones sexuales en las universidades, y se opone a una prohibición de portar armas en las escuelas, diciendo que necesitan protegerse de los osos.
Como si fuera poco, ignora lo básico del debate entre “crecimiento” y “habilidad” que domina en la educación a nivel federal.
En lo universitario DeVos rechaza de plano la idea de una universidad gratuita.
Además estuvo confusa cuando se le pidió acción ante los abusos de las universidades con fines de lucro.
La audiencia fue hecha a las corridas, protegiendo a DeVos de las preguntas con un inusual límite de tiempo para preguntar. Fue realizada sin el debido reporte sobre ética de cada nominado. Esto es grave porque ella es parcialmente dueña de una empresa para cobrar la deuda morosa de los préstamos universitarios.
La enseñanza terciaria gratis le mataría el redituable negocio de ir tras el negocio de la deuda estudiantil. Una deuda que ella podrá controlar con los préstamos federales de la agencia que dirigirá.
DeVos es la persona menos indicada para el Departamento de Educación por no tener idea, sino prejuicios, de lo que ocurre en la enseñanza pública y por un claro conflicto de interés.