Migrante demanda a ICE, a siquiatra y a carcelera del centro privado donde está detenida
Laura Monterrosa, salvadoreña de 23 años, ha denunciado acoso sexual, falta de tratamiento médico y represalias por denunciar su caso. MALDEF se une ahora a la joven, presentando una demanda en su nombre y exigiendo su liberación y tratamiento médico
Una migrante salvadoreña de 23 años detenida por las autoridades migratorias en un centro “residencial” para mujeres en Texas demandó este viernes a ICE, la carcelera del centro privado donde está encerrada desde hace nueve meses y la siquiatra del lugar, alegando que le han negado la atención médica que necesita.
Laura Monterrosa es la migrante que tras denunciar acoso sexual de parte de una guardia de la prisión privada intentó suicidarse en al menos una ocasión. En dos oportunidades, Monterrosa ha llamado a La Opinión desde el centro de detención para denunciar los abusos y expresar su desesperación ante el trato que recibe en ese lugar.
MALDEF, El Fondo Mexicoamericano de Defensa Legal y Educación está representando a la joven solicitante de asilo en esta solicitud legal, y el viernes los abogados presentaron una petición de habeas corpus y de orden de restricción, solicitando la liberación de Laura o, en su defecto, una serie de medidas que comienzan con la garantía de tratamiento médico y siquiátrico que necesita la muchacha.
La demanda presentada por MALDEF en nombre de Laura alega que ICE, la jefa de carceleros del centro don Hutto Charlotte Collins y la siquiatra del lugar, Dra Lynda Parker, han violado los derechos constitucionales de Laura y la ley federal de Rehabilitación de 1973.
Dicha ley “requiere que todo detenido reciba cuidado médico adecuado, incluyendo salud mental”.
Según alegan la demanda, la siquiatra Parker ha instado a la muchacha a no reclamar y guardar silencio sobre sus problemas siquiátricos, alegando que eso afectaría su caso de inmigración.
Activistas de Grassroots Leadership que visitan y difunden información sobre el caso de Laura, han dicho en repetidas ocasiones a La Opinión que personas dentro de la prisión le han dicho que deje de hacer denuncias y han tomado represalias, encerrándola en un cuarto aislado y frío al menos dos veces.
ICE ha dicho a La Opinión que el caso de Laura se ha tratado de acuerdo a las reglas, se le ofreció transferirla a otro centro y que no existe ninguna celda de aislamiento en Hutto.
Una siquiatra enviada por los representantes legales de Laura la evaluó dentro de la prisión y determinó que la muchacha, que escapó de El Salvador tras sufrir amenazas y abuso infantil y sexual, sufre de Síndrome de Estrés Postraumático y de trastorno depresivo mayor.
“Está claro que en Hutto no hay voluntad o capacidad para asegurar que Laura reciba el cuidado médico que necesita desesperadamente”, dijo Celina Moreno, abogada de MALDEF. “Acudimos al tribunal porque ella ya no puede esperar. Hutto tiene una historia preocupante y ICE ha sido indiferente a sus propios reglamentos”.
Según un comunicado de MALDEF, Hutto tiene un historial nada halagueño en este particular. “Era una prisión estatal y luego se convirtió en centro de detención para familias migrantes, cuando fue objeto de una demanda legal que alegó falta de atención sanitaria y oportunidades educativas para los niños“.
La demanda contra Hutto resultó en un acuerdo extrajudicial que estableció nuevos reglamentos para los centros de detención.
Eventualmente el lugar pasó a ser un centro de mujeres adultas. En 2007, un oficial de ICE fue despedido por tener sexo con una mujer detenida en su celda y también hubo acusaciones de abuso sexual contra otro guardia en 2009.
Don Hutto es una centro privado manejado por la compañía carcelera Core Civic (Antes CCA) y bajo contrato por el gobierno federal para detener a mujeres adultas solas en la comunidad de Taylor, Texas.