Así es el extraño vínculo entre una niña y un pato
La niña no quiere ir a ningún lado sin su pato
Los sentimientos no entienden de razas, ni de especies. Hay vínculos que nadie puede romper.
Un buen ejemplo de ello son una niña llamada Kylie y su pato, Snowflake.
Desde que los padres de la paqueña trajeron al pato a casa, la vida de todos ha cambiado. Kylie ha encontrado en el animal a su mejor amigo y él, a juzgar por su comportamiento, ve en Kylie lo más parecido a una mamá. Por eso la sigue a todas partes.
En una entrevista a CBS News podemos ver la estrecha relación y las opiniones de la dulce niña.
“Soy su madre”, explica Kylie a Steve Hartman, del mencionado medio.
Al principio, los padres dejaban al animal en el patio trasero, pero cuando Snowflake se negó a quedarse ahí, no tuvieron más remedio que ponerle un pañal y convertirlo en un pato doméstico.
El pato espera a Kylie en la parada de autobús escolar todos los días. También acompaña a la niña en sus prácticas de fútbol e incluso se va de vacaciones a la playa con la familia.
Tal y como cuenta Mike Brown, el padre de Kylie, el pato va a todas partes donde permiten animales.