VIDEO: Esposo de Marlen Ochoa muestra al bebé, que sigue luchando por su vida
Un día antes de despedir a su mujer Marlen Ochoa, Yovany López mostró en una retransmisión en directo por Facebook al hijo de ambos. El bebé, arrancado del vientre de su madre estrangulada, continúa en estado crítico. Sin embargo, la familia decidió no desconectarlo de la máquina que lo mantiene vivo ya que considera que es “lo único que Marlen nos dejó“.
Tras estrangular a Marlen Ochoa y arrancarle a su bebé del vientre, la presunta asesina (Clarisa Figueroa) llevó al niño al hospital y se hizo pasar por su madre. El personal del hospital trató de mantener al niño con vida y no corroboró si Figueroa era realmente su progenitora. La familia Ochoa ha criticado ampliamente esta negligencia.
En el video de más de nueve minutos y medio, López muestra a su hijo luchando por sobrevivir y pide a toda la comunidad rezar por la pronta recuperación del menor. La esperanza de Yovany y de toda la familia aumentó cuando el pequeño abrió los ojos.
La despedida de Marlen clamaba justicia
Familiares, amigos y muchos miembros de la comunidad despidieron este sábado a Marlen Ochoa en Stickney, al suroeste de Chicago (Illinois). Su funeral, además de un último adiós, fue también un clamor de justicia.
Sobre un caballete al lado del féretro color plata reposaba la imagen de Ochoa, la joven de 19 años a la que mataron para sacarle el bebé que había llevado en su vientre durante nueve meses. Los arreglos florales, repartidos por toda la casa funeraria, acogían a quienes habían venido a recordar a Marlen y a su constante sonrisa.
El oficio religioso estuvo a cargo de la misma persona que casó a Marlen Ochoa con su esposo Yoani López. Carlos Tamay, de la Séptima Iglesia Adventista de Des Moines (en Iowa), aseguró que “jamás pasó por su mente que daría el mensaje de consolación en su funeral”.
El momento reivindicativo llegó con la intervención de Julie Contreras, miembro de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC). Contreras hizo alusión precisamente a la comunidad y a la unión de todo el pueblo latino. En un emotivo discurso en el que hacía también suyo el dolor, la activista convirtió a la madre fallecida en un aliciente para la lucha.
“Si no hay justicia, no habrá paz” -repitió hasta la saciedad Contreras, descendiente de mexicanos. Pero la mujer no se limitó a las palabras de consuelo sino que había preparado una inicitativa de ley específica con el nombre de la fallecida.
La “Ley Marlen” plantea la exigencia a los hospitales de identificación y pruebas de ADN a quienes afirmen haber dado a luz en casa. El objetivo de esta iniciativa de ley, afirmó Contreras, es “que nuestros hijos no caigan en manos de criminales“.